Medio ambiente
El Gobierno impulsará infraestructuras verdes para conectar ecosistemas hasta 2050
- Las autonomías tienen tres años para aprobar sus planes autonómicos
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El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico cuenta con una hoja de ruta para, en colaboración con las comunidades autónomas, conectar los ecosistemas españoles mediante infraestructuras verdes que generarían una importante cantidad de empleos y de inversiones económicas hasta 2050.
Ese plan está concretado en la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas, que previsiblemente aprobará este martes el Consejo de Ministros.
España no es ajena a la tendencia mundial de que en las últimas siete décadas se ha consumido más energía que en los 12.000 años anteriores, lo que ha impulsado el cambio climático, una extinción masiva de especies -un informe auspiciado por la ONU indica que un millón de especies están en peligro en los próximos decenios- y la destrucción de ecosistemas naturales.
Actualmente, un 30% del territorio de la UE presenta un grado de fragmentación entre moderado y alto. Cada año se ocupan más de 1.000 kilómetros cuadrados para construcción de viviendas, usos industriales, carreteras o fines recreativos, según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA). España comparte esta tendencia y sufre un proceso continuado de fragmentación de ecosistemas desde hace décadas.
ECOSISTEMAS FRAGMENTADOS
Para frenar esos efectos, Transición Ecológica dispone de una estrategia con el objetivo principal de restaurar ecosistemas dañados y consolidar una red de zonas naturales y seminaturales que puedan estar totalmente conectadas en 2050. España cuenta con figuras de protección en un 33% de su superficie terrestre y un 12% de las aguas marinas, pero son insuficientes para detener la degradación del territorio, según fuentes del departamento dirigido por Teresa Ribera.
Además, los ecosistemas están fragmentados por cambios en los usos del suelo y la construcción de barreras locales como la urbanización, la agricultura intensiva, modificaciones en la cubierta vegetal, infraestructuras lineales de transporte, presas y azudes, canales, vallados cinegéticos, tendidos eléctricos, alineación de aerogeneradores y barreras marinas como puertos, espigones, tuberías, etc.
Todo ello acelera la pérdida de conectividad verde y la disminución de la biodiversidad. No en vano, sólo un 9% de los hábitats y un 21% de las especies en España están actualmente en un buen estado de conservación.
OCHO METAS Y 50 LÍNEAS DE ACTUACIÓN
Por ello, Transición Ecológica quiere impulsar la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológica con el fin de prevenir el aislamiento de genético de especies de fauna y flora, facilitar las migraciones y mantener una biodiversidad sana y resiliente a los impactos del cambio climático.
La 'infraestructura verde' es un concepto de conservación que comenzó a acuñar la Comisión Europea en 2013. Se trata de una herramienta de ordenación territorial que persigue la planificación y la gestión en red de ecosistemas marinos, terrestres, rurales y urbanos. La Estrategia pretende identificar los espacios naturales que hay que mantener o restaurar, y plantea acciones tanto para conservarlos como garantizar su conectividad ecológica.
La Estrategia tiene como punto de partida identificar y delimitar la red básica de infraestructura verde en España. Cuenta con ocho metas y 50 líneas de actuación, y va acompañada de una guía metodológica para que sobre todo las comunidades autónomas identifiquen sus infraestructuras verdes. Los gobiernos regionales tienen tres años como máximo para aprobar sus estrategias autonómicas. Y el Ejecutivo español desarrollará acciones con programas de trabajo trienales.
Uno de los ámbitos de trabajo es la restauración de zonas verdes cuando no sea posible eliminar infraestructuras perjudiciales (por ejemplo, los tendidos eléctricos causan una elevada mortandad de aves que se electrocutan en ellos, reducir los impactos mortales de las carreteras en especies de fauna o recuperar la cubierta vegetal quemada en un incendio forestal). Desde Transición Ecológica no se plantean mayores expropiaciones de terrenos y confían en la cooperación con las comunidades autónomas para llevar a cabo las actuaciones pertinentes.
APLICACIÓN
Una vez aprobada la Estrategia, el Gobierno pretende impulsar su aplicación con la cooperación de las comunidades autónomas. Desde Transición Ecológica afirman que se trata de una herramienta que movilizará muchos puestos de trabajo e inversiones en obras de restauración, sobre todo en zonas rurales.
España es uno de los países de la UE con mayores y más zonas naturales o seminaturales, con una densidad de infraestructuras de 0,61 kilómetros por cada kilómetro cuadrado de superficie, lo que supera el umbral crítico de 0,60 a partir del cual el paisaje empieza a perder su funcionalidad natural y los ecosistemas dejan de prestar servicios (polinización, seguridad alimentaria o protección frente a zoonosis que pueden causar pandemias como la Covid-19, por ejemplo).
La Estrategia plantea un calendario con hitos y evaluaciones intermedias con el fin de consolidar una red de infraestructura verde en España en 2050 mediante la restauración de ecosistemas degradados, soluciones basadas en la naturaleza, políticas sectoriales estratégicas, la planificación y ordenación territorial de elementos clave a varias escalas (local, metropolitana, comarcal, regional y nacional), modelos de gobernanza con coordinación interadministrativa e interterritorial, la integración de la infraestructura verde en los procesos de evaluación ambiental y la concienciación social, el compromiso y la corresponsabilidad de actores estratégicos.
(SERVIMEDIA)
26 Oct 2020
MGR/mjg