Por ello, Ecologistas en Acción y la Asociación Española de Entomología lanzaron este miércoles la campaña 'Sin insectos no hay vida' con el fin de sensibilizar a la sociedad y a las administraciones de la importancia ecológica de los insectos; las graves consecuencias ambientales, sociales y económicas que conlleva su progresiva desaparición, y la necesidad de adoptar medidas urgentes para su conservación.

Ambas entidades han elaborado diverso material informativo en las diferentes lenguas oficiales de España: un informe, un cartel, cinco modelos de pegatinas, un tríptico, varios vídeos y diversas infografías y 'memes', que se difundirán en asociaciones, centros educativos y redes sociales.

En 2017, un estudio demostró que se había reducido más del 75% de la biomasa de insectos voladores en áreas protegidas de Alemania y publicaciones posteriores han analizado situaciones semejantes en los ámbitos mundial, europeo e ibérico. Mariposas, abejas, libélulas y escarabajos, entre otros, son los grupos con las especies más amenazadas.

CAUSAS DEL DECLIVE

El declive de los insectos es consecuencia de la pérdida de hábitat -especialmente de prados y pastizales- debido a los usos agrícolas, la utilización de plaguicidas -insecticidas, herbicidas y fungicidas-, la incidencia de patógenos y el cambio climático. Se cree que un 40% de las especies de insectos polinizadores se hallan en peligro de extinción por las actividades humanas.

La polinización es uno de los procesos ecosistémicos más importantes y depende en gran parte de los insectos. Según la UE, el 84% de las especies vegetales y el 76% de la producción alimentaria en Europa dependen de la polinización realizada por las diferentes especies de abejas.

La FAO calcula que la producción agrícola mundial que depende directamente de los polinizadores está entre 235.000 y 577.000 millones de dólares al año, y el volumen de la producción agrícola que depende de los polinizadores ha aumentado en un 300 % en los últimos 50 años. Especialmente grave es el caso de las especies de abejas silvestres, ya que sus poblaciones están sufriendo una gran regresión por la acción antrópica, principalmente por la utilización de plaguicidas (herbicidas, fungicidas, insecticidas y, entre ellos, los neonicotinoides).

Por ello, la Asociación Española de Entomología y Ecologistas en Acción consideran esencial que las administraciones adopten medidas para frenar las principales amenazas que sufren los insectos, especialmente evitar la destrucción de su hábitat, motivada muchas veces por la actividad agraria, y reducir el uso de plaguicidas con programas de buenas prácticas agrícolas y de asesoramiento en cuanto al manejo integral de plagas y de la polinización.

También piden recuperar los ecosistemas degradados más utilizados por los insectos restaurando los espacios silvestres y urbanos, y aumentando la abundancia, la diversidad y la continuidad de sus recursos florales o de otra índole, e incluir en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y Catálogo Español de Especies Amenazadas de un importante número de insectos.

También reclaman que se fomente la investigación sobre los insectos en España a través de proyectos actualizados de seguimiento y evaluación para poder conocer su estado de conservación real, facilitando su adecuada protección y frenar su extinción. Y que se fomenten programas de educación y sensibilización de la sociedad sobre la importancia y el respeto a la biodiversidad y sobre los beneficios que los insectos proporcionan al ser humano y al medio ambiente.