La compañía, explica en un comunicado, activó su protocolo de seguridad "pese a no haber relación causal entre la leche y los casos de salmonela detectados las últimas semanas".

Además, asegura que los resultados analíticos de las muestras analizadas por el Instituto de Salud Carlos III, perteneciente al Ministerio de Ciencia e Innovación, y de los que dispone la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (Aesan) también han sido negativos, no se encontró ningún agente patógeno en la leche infantil.

Según esta compañía, desde el pasado 8 de enero, en España se han producido algunos casos de niños que han padecido alteraciones gastrointestinales, dándose la coincidencia, en algunos de ellos, que eran bebés que habían tomado leche del lote retirado preventivamente.

Al tener noticia de los mismos, Ordesa inició un proceso de investigación, detectando una posible falta de estanqueidad en las latas consumidas por los niños con dichas alteraciones. Pese a no haber detectado ninguna relación causal entre las alteraciones de los bebés y la leche, "el laboratorio decidió actuar rápidamente, retirando de forma preventiva el lote de producto mencionado".

En todo este proceso, Ordesa sotiene que ha informado puntualmente a las autoridades sanitarias nacionales y autonómicas, así como a farmacéuticos, médicos y consumidores.

“Nuestra empresa aplica los mas altos estándares de calidad por lo que estamos seguros que este problema es un hecho aislado y no guarda relación con la gastroenteritis que han sufrido algunos niños”, concluyó la doctora Montserrat Rivero, directora general científica de Laboratorios Ordesa.