Así lo señaló en una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados en la que comunicó la decisión del Ejecutivo de suspender la aplicación de las reglas fiscales a todas las administraciones tanto en 2020 como en 2021, de manera que el CPFF del lunes tendrá como objetivo comunicar a las comunidades autónomas la forma de actuar en este contexto.

En este sentido, la ministra subrayó que la suspensión de las reglas fiscales no significa que se abandone la sostenibilidad de las cuentas públicas y confió en la responsabilidad fiscal de todas las administraciones. Así, señaló que la suspensión de las reglas fiscales conlleva que el Ejecutivo no planteará una senda de estabilidad con nuevos objetivos de déficit y deuda, pero que en el CPFF sí trasladará a las comunidades unas tasas de referencia respecto a las previsiones de déficit que el Gobierno tiene para 2020 y 2021 que les sirvan para elaborar sus cuentas del próximo ejercicio.

Asimismo, Montero resaltó que el Ejecutivo mantiene su compromiso con la estabilidad fiscal y financiera y, en este sentido, apuntó que en 2021 el déficit disminuirá respecto a 2020.

Por otro lado, la titular de Hacienda aseguró que la suspensión de las reglas fiscales y la no elaboración por el momento de una nueva senda de estabilidad no quiere decir que no se presente un nuevo límite de gasto no financiero, por lo que el conocido como ‘techo de gasto’ se aprobará en “los próximos” Consejos de Ministros para posteriormente presentarlo en el Congreso de los Diputados.

En cuanto a la fecha para presentar el proyecto de Presupuestos en la Cámara Baja, Montero declaró que todavía no está fijada, ya que el proyecto se está “ultimando”, pero apuntó que su elaboración, fruto de la negociación entre PSOE y Unidas Podemos, “va al 90%”.

A este respecto, preguntada sobre la intención del Gobierno de cara a las negociaciones para la aprobación de las cuentas públicas y si en ellas influirá la inhabilitación del president de la Generalitat, Quim Torra, la ministra afirmó que cuentan con que siga “plenamente vigente” el compromiso mostrado por aquellos partidos que indicaron su disponibilidad a negociar, “como Ciudadanos, PNV y ERC”, aunque indicó que “habrá que volver a preguntar a Junts per Catalunya”.