Según informó Iberia en un comunicado, el nuevo presidente de la compañía, Javier Sánchez-Prieto, presentó este jueves un nuevo diseño del Comité de Dirección que pasará a estar conformado por ocho direcciones tras la fusión de cuatro direcciones en dos.

La dirección Comercial, que hasta ahora ocupaba Marco Sansavini, nuevo CEO de Vueling, y la direccion de Red y Alianzas, estarán dirigidas a partir de ahora por una misma persona, María Jesús López Solás, hasta ahora directora de Cliente y, anteriormente, de Red y Alianzas.

Igualmente, las funciones de Transformación, Sistemas y Cliente se agrupan bajo una misma dirección, que ocupará Gabriel Perdiguero, hasta ahora director de Transformación y Sistemas.

Asimismo, se nombra nuevo director de Mantenimiento a Andy Best, actual responsable comercial de este área, en sustitución de André Wall, que recientemente dejó la compañía para incorporarse a un nuevo proyecto.

En la nueva cúpula de Iberia se crea una Dirección de Personas, que aglutinará tanto Relaciones Laborales como Desarrollo de Personas y gestión de Talento. Para esta nueva dirección, se produce la única incorporación externa al equipo, Agustín González Hermosilla, hasta la fecha director de Relaciones Laborales de Ferrovial Corporación y de Recursos Humanos de Ferrovial Servicios España.

El resto del comité lo formarán las personas y funciones actuales: José Antonio Barrionuevo como director de Estrategia y Finanzas, Juan Cierco como director Corporativo, Rafa Jiménez Hoyos, director de Producción, y Ángel Marcos como director de Servicios Aeroportuarios.

Sánchez-Prieto ha explicado los cambios señalando que "la situación actual, muy condicionada por la pandemia del coronavirus, nos obliga a tomar decisiones rápidas. El nuevo equipo directivo cuenta con la experiencia, solvencia técnica y determinación que necesitamos en este momento para superar los retos a los que nos enfrentamos y seguir avanzando hacia la recuperación de la demanda”.

La aerolínea propiedad de IAG destaca en el comunicado que la nueva organización es, por un lado "continuista", y por otro "austera", "dentro de la estrategia de contención de costes necesaria para superar los efectos de la crisis sobre los negocios".