En declaraciones a los periodistas tras participar en el Ecofin celebrado en Berlín, la ministra recordó que se está trabajando “en varios canales paralelos”, siendo la OCDE uno de ellos, y que “si finalmente no se llega a un acuerdo, tendremos que ver cuál es la respuesta adecuada en el ámbito comunitario”. Además, recordó que el proyecto de ley para la creación de este impuesto se encuentra en tramitación parlamentaria en el Congreso de los Diputados.

Asimismo, aseguró que durante el Ecofin celebrado este viernes y sábado “hemos hablado mucho sobre este tema” y recordó que “existe un mandato por parte de nuestros líderes que salió del Consejo Europeo de reflexionar sobre el establecimiento de nuevos recursos propios que incluso puedan eventualmente servir para devolver, para pagar y amortizar la deuda adicional que la Unión Europea va a suscribir en la aplicación de los nuevos instrumentos comunitarios”.

“Es en este contexto, en el que se ha planteado distintas opciones dentro de estos recursos propios, una buena parte de ellos están ligados a las políticas comunitarias en el ámbito de la transición ecológica, también se ha planteado el impuesto digital y se han planteado otras opciones”, agregó.

Respecto al ámbito de la transición ecológica, Calviño indicó que “España ha venido defendiendo la necesidad de establecer un mecanismo de ajuste en frontera del CO2, puesto que si estamos aumentando los estándares y las exigencias al sector empresarial europeo, tenemos que asegurarnos de que el resto del mundo también se alinea con esos estándares y que no se genera una desventaja competitiva para las empresas europeas”.