Lo dijo durante su intervención ante el Pleno del Senado después de que Sánchez informara de las líneas generales de la actuación del Gobierno, en la que elogió al jefe del Ejecutivo por su apuesta por la cogobernanza para afrontar la pandemia del coronavirus, por forjar un “escudo social” ante los estragos sociales y económicos causados por la misma y por “liderar y alcanzar un acuerdo histórico en la Unión Europea”.

Gil aprovechó gran parte de su intervención para arremeter contra el PP por su negativa a apoyar las cuentas públicas y la renovación de las instituciones. Lo hizo dejando claro que el Gobierno no anhela que los populares sean “sean una muleta, sino un partido de Estado y que se comporten como tal”.

También adujo que “no valen ni excusas ni voluntades de acuerdo de usar y tirar” para que España cuente con unos Presupuestos “acordes al momento actual”, lo que le sirvió afear al PP que mientras Sánchez y el Gobierno “luchan contra la pandemia”, los populares lo hacían contra el Ejecutivo y su presidente. Una actitud, prosiguió Gil, que se les ha vuelto en contra, porque “se ha cobrado a una portavoz en el Congreso y la poca credibilidad que le quedaba a Casado".

A su vez, reprochó al PP que presuma de ser constitucionalista y se permita el lujo de bloquear las instituciones. “No tiene límite, están en caída libre y cometiendo un fraude con su actitud a la democracia española”, aseveró.

Conjeturó con el hecho de que al PP no le conviene renovar las instituciones por interés partidista, poniendo como ejemplo de ello el papel que este partido jugó en la ‘operación Kitchen’.

Por último, se dirigió al senador de Vox Jacobo González-Robato Perote, quien durante su intervención atacó al Gobierno por permitir con su gestión la entrada sin control de miles de inmigrantes ilegales mientras impiden trabajar a españoles, convirtiendo los barrios en “estercoleros culturales”.

Lo hizo para atestiguar con la sociedad española derrotará a “dos virus”: el coronavirus, que “vulnera la vida” de los españoles, y la “ultraderecha, que hace daño a la democracia española”.