En un comunicado, pidió también una reunión urgente con los ministerios de Interior y de Migraciones para reivindicar "soluciones ante las alarmantes condiciones en las que estas personas son recibidas tras su llegada a las ciudades autónomas".

Según la federación, además de al contagio, las personas Lgtbi de los CETI de Melilla y Ceuta están expuestas a sufrir agresiones Lgtbifóbicas, al no poder disponer de aquellos espacios reservados para personas del colectivo que son imprescindibles para garantizar su seguridad en este tipo de centros.

“Las personas Lgtbi que llegan a Melilla y Ceuta abandonan sus países de origen debido a la violencia que sufren como consecuencia de su orientación sexual o identidad de género y, actualmente, tanto dentro de los CETI como en las ciudades autónomas, están conviviendo con los compatriotas y familiares de los que huyeron”, aseguró Rodrigo Araneda, portavoz de la Comisión de Migrantes de Felgtb.

En este sentido, denunció que “desde hace nueve meses no se ha producido ningún traslado de personas Lgtbi a la Península, cuando lo habitual es que se sucedan cada seis. Esto significa que hay personas que llevan nueve meses esperando a ser reubicadas en un espacio seguro”.

Según el presidente de la entidad melillense de Felgtb-Amlega, Rafael Robles, “este verano se ha detectado un repunte de agresiones contra personas Lgtbi, muchas de ellas cometidas en el camino que va desde el CETI, situado en la periferia, a la ciudad de Melilla”.

La federación recordó además que el pasado mes de julio, el Tribunal Supremo avaló la libertad de circulación por todo el territorio estatal de las personas solicitantes de asilo retenidas hasta el momento en Ceuta y Melilla. Sin embargo, “siguen existiendo importantes trabas en lo referente al traslado de estas personas a la Península", y reivindicó "medidas concretas y soluciones inmediatas para solventar la situación”.