Junto a OAFI, el Foro Español, Aecosar, Conartritis, AGP Alianza General de Pacientes y la Liga Reumatolóxica Galega han realizado distintos manifiestos para explicar por qué sería contraproducente que se tomara la decisión de retirar este tratamiento. Todas estas asociaciones aseguraron que "como es sabido, la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, pretende desfinanciar unos fármacos conocidos como 'condroitín sulfato' y 'controitín sulfato más 'glucosamina', aprobados por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, por su eficacia y seguridad".

De llevarse a cabo dicha desfinanciación, los pacientes advirtieron de que se dejarían sin alternativa terapéutica a personas con artrosis de rodilla y manos y con comorbilidades (enfermedades cardiovasculares: hipertensión arterial HTA, isquemia coronaria e infarto de miocardio, y también insuficiencia renal y hepatopatías etc), "afectando gravemente a grupos vulnerables que sufren estas patologías, sobre todo personas mayores y mujeres.

Además, asociaciones europeas que colaboran en el Grupo Internacional De los Pacientes con Artrosis como la Asociación Italiana de las Personas con Enfermedades Reumatológicas y Raras (Italia), la Asociación Francesa por la Lucha contra los Reumatismos (Francia), la Liga Portuguesa Contra las Enfermedades Reumáticas (Portugal) y ReumaNederland(Nederland), también han mostrado su preocupación por esta situación.