Así lo dijo en el primer acto de campaña electoral para las autonómicas gallegas del 12 de julio, celebrado en Ourense, en el que defendió que “nos jugamos” qué “respuesta” se da a la crisis derivada de pandemia, entre la que representa el PP de Alberto Núñez Feijóo o la del PSOE de Gonzalo Caballero.

“La fórmula del Partido Popular para responder a las crisis es ‘sálvese quién pueda’ y frente a ello la de un gobierno firme, con una clara voluntad de no dejar a nadie atrás”. “O sálvese quien pueda o no dejar a nadie atrás, o el Partido Popular o el Partido Socialistas de Galicia”, resumió.

Ourense es la primera incursión de Sánchez en esta campaña marcada por evitar contagios de coronavirus. El recinto elegido, el Xardín do Posío, congregó a un aforo limitado de 500 personas que, todas ellas con mascarillas –muchos con una roja del PSOE como la que lucía el presidente-, estaban sentadas de manera individual y respetando la distancia de seguridad.

A todos los que han entrado se les ha tomado la temperatura, según trasladan a Servimedia algunos de los presentes en el mitin. Fuera del recinto se han congregado personas a las que no se les ha dejado pasar por la reducción del aforo.

Entre las novedades de esta campaña está la incorporación de las mascarillas del PSOE entre el merchandising. Se repartían entre los asistentes del acto y le dieron una incluso al presidente del Gobierno y líder del partido que se la puso en el escenario, según las fuentes consultadas.

Antes de Sánchez, el candidato socialistas, Gonzalo Caballero, hizo un alegato a la movilización y a no resignarse para propiciar el cambio en la Xunta tras años de gobierno del PP.

Por su parte, el secretario provincial del PSOE, Rafa Villarino, abrió el acto definiendo a Sánchez como un “luchador que en la peor crisis está ayudando con medidas reales” como los ERTE y el Ingreso Mínimo Vital, mientras “el PP está bloqueando en Europa y ‘cacicando’ en Ourense”.

La cabeza de lista del PSOE por Ourense, Marina Ortega, destacó el “control, la seriedad y la serenidad” de Sánchez “frente a la crispación de otros” ante la pandemia.