Así se desprende del informe anual de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) presentado hoy, con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas que se celebra mañana sábado, 20 de junio.

De los más de 60.000 expedientes que se resolvieron el pasado año, poco más de 3.000 personas lograron el estatuto de refugiado o la protección subsidiaria en España.

En cambio se concedió la autorización de residencia por razones humanitarias a cerca de 40.000 personas, en su inmensa mayoría originarios de Venezuela. Mientras, más de 17.000 personas quedaron sin ningún tipo de protección, muchas de ellas procedentes de países en conflicto como Colombia, Palestina, Nicaragua y Honduras.

En 2019, más de 118.000 personas buscaron refugio en España, lo que supone un aumento del 118% respecto al ejercicio anterior.

El 77% de todas ellas procedían de seis países americanos: Venezuela, (40.906), Colombia (29.260), Honduras (6.792), Nicaragua (5.931), El Salvador (4.784) y Perú (3.989).

Por el contrario, la exigencia de visado de tránsito aeroportuario provocó un acusado descenso de las peticiones procedentes de Siria, Palestina y Yemen.

En el conjunto de la Unión Europea se registraron más de 700.000 peticiones de protección internacional, de las que el 16% correspondieron a España, que se sitúa como tercer país que más solicitudes registró, por detrás de Alemania y de Francia. Supera en cambio a Grecia e Italia, que en 2019 experimentó un descenso del 27% en este terreno.

MÁS RECURSOS, PERO INSUFICIENTES

El informe de CEAR reconoce que se ha producido "un importante refuerzo de medios y de personal" en la Oficina de Asilo y Refugio (OAR), aunque "la acumulación de expedientes pendientes" sigue suponiendo un grave problema.

A finales de 2019, más de 130.000 personas estaban a la espera de una resolución "de la que depende su futuro", lamentó. La mitad de ellas procedían de Venezuela y Colombia, y subrayó que solo Alemania tiene más solicitudes en trámite en la UE.

Por otro lado, CEAR señaló que las plazas del Sistema Nacional de Acogida se han duplicado en los últimos tres años, hasta llegar a las 9.000 actuales.

Sin embargo, este incremento resulta "insuficiente para atender a las más de 324.000 personas" que pidieron una plaza en el mismo periodo de tiempo. Debido a ello, el tiempo medio de espera para acceder a uno de estos recursos pasó de cuatro a seis meses.