Así lo indicó en la sesión de control al Gobierno en el Senado al responder a una interpelación de la senadora María Dolores Etxano, del PNV, sobre “los Presupuestos Generales del Estado adaptados a las nuevas previsiones derivadas de la crisis ocasionada”.

En su intervención, la ministra indicó que el coronavirus ha supuesto “un vuelco absoluto” de las previsiones macroeconómicas a nivel mundial y que la pandemia ha puesto fin “de manera abrupta” a la recuperación de los últimos años.

Así, resaltó que el conjunto de medidas aprobadas por el Gobierno para hacer frente a la crisis tendrá un impacto de 138.000 millones, a los que habrá que sumar el fondo de 16.000 millones a repartir entre las comunidades autónomas, de forma que el gasto público aumentará en 10 puntos porcentuales respecto a 2019, hasta el 51,5%, mientras los ingresos caerán un 5,5%, unos 25.000 millones, y la deuda alcanza el 115% del PIB.

Por ello, Montero aseguró que la nueva situación “invalida” la senda de estabilidad presupuestaria que fue aprobada en febrero y apuntó que la desviación en los objetivos de estabilidad “va a ser objeto de análisis en los próximos días por la Comisión Europea”.

En este sentido, la ministra mostró su esperanza de que la institución europea “haga unas recomendaciones razonables” sobre la senda a seguir en los próximos años y que el debate que se abra a nivel europeo permita acometer la disciplina fiscal sin defender “a ultranza una austeridad que ahogue aún más a los países”.

Además, la titular de Hacienda resaltó que el Ejecutivo trabaja para presentar en tiempo y forma el proyecto de Presupuestos de 2021, que tendrá como uno de sus principales objetivos “que no se generen más desigualdades” con la crisis actual.

Asimismo, Montero destacó el compromiso del Gobierno con comunidades autónomas y corporaciones locales, asegurando que se están monitorizando todas las partidas presupuestarias para priorizar el gasto sanitario y social, y reiteró la intención de flexibilizar la regla de gasto para que los ayuntamientos puedan utilizar su superávit para hacer frente a la crisis.

Por su parte, la senadora del PNV presentó a la ministra la disposición de su formación política para negociar las medidas necesarias para hacer frente a la crisis, así como los Presupuestos de 2021, sobre los que resaltó la importancia de trabajar ya en su tramitación para presentarlos en los tiempos parlamentarios establecidos.

En este sentido, Etxano aseguró que unos Presupuestos “trasladarían un mensaje de seguridad, certidumbre y coherencia”, por lo que también indicó la importancia de “marcar una senda justa y realista del ajuste fiscal”. Para ello, la senadora vasca apuntó a la necesidad de que, tras la pandemia, se siga una disciplina fiscal que no conlleve recortes, con políticas expansivas en lugar de austeridad, pero sí reformas estructurales, y que esto deberá iniciarse con las próximas cuentas públicas.