Economía

Calviño dice que el Gobierno recurrirá o no a la financiación europea en función de si resulta la “más eficiente posible”

MADRID
SERVIMEDIA

La vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos y de Transformación Digital, Nadia Calviño, anticipó este jueves que el Gobierno decidirá recurrir o no a los mecanismos de financiación que se están desplegando en Europa bajo el único prisma de maximizar el “interés general de los ciudadanos” y buscar la financiación “más eficiente posible”.

Sobre la mesa hay tres herramientas en Europa: la creación de un fondo común para paliar el desempleo con 100.000 millones de euros disponibles para préstamos (el llamado Sure), la movilización de otros 200.000 millones por parte del Banco Europeo de Inversiones (BEI) para empresas y abrir una línea especial en el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para financiar el gasto sanitario de la pandemia a los Estados.

“Siempre es bueno tener alternativas de financiación. Tomaremos la decisión sobre la base del interés general de los ciudadanos españoles que es financiarnos de la manera más eficiente posible”, explicó durante una intervención en el Senado y a preguntas de si España solicitará un rescate haciendo uso del MEDE.

Tras reconocer sorpresa porque se hable de pedir un rescate, Calviño replicó que “España ya está bajo un rescate: el que se pidió en el año 2012”, en alusión a los 41.000 millones de euros que se tomaron en préstamo a Europa con el Gobierno de Mariano Rajoy para evitar el colapso de la banca.

Según relató, dicha petición le obliga a dar “explicaciones” cada seis meses en el Ecofin al encontrarse España bajo una supervisión reforzada, aunque “gracias al esfuerzo de estos años, hemos podido pagar anticipadamente unos 16.000 millones más o menos”.

“Ahora se está hablando de algo completamente distinto, de un instrumento precautorio para la pandemia que no tiene condicionalidad y que se destinará a financiar los gastos directos e indirectos del Covid”, aclaró en alusión al uso que tendrá la línea del MEDE.

Sin adelantar si el Gobierno analiza ya o no su uso, sí defendió que habrá que decidir en función del coste de captar recursos. “Yo creo que ninguno podemos defender que los impuestos de los españoles tengan que destinarse a pagar intereses. Estoy segura de que todos estaremos de acuerdo, y veremos cuál es el interés o cuál es la forma de financiación que más nos interesa”, agregó.

A renglón seguido subrayó que “en estos momentos España se financia en unas condiciones muy beneficiosas en los mercados financieros, comparables a las que teníamos el año pasado y que, incluso, han mejorado esta última semana”, como lo prueba que el Tesoro volviese a colocar Letras a 12 meses con tipos de interés negativos.

“En este momento no tenemos problemas de financiación”, recalcó, afirmando que “hay una gran confianza en la economía española” como lo prueba la alta demanda de deuda por parte de inversores extranjeros, y aseguró que el Gobierno está “haciendo todo lo posible por reforzar esa confianza en nuestro país”.

Durante su intervención Calviño expresó su expectativa de que entre mañana y el martes se cierren los últimos flecos pendientes del fondo Sure, un “embrión del seguro de desempleo” en Europa que ha defendido desde el principio el Gobierno español” y que podría ayudar a financiar los costes de los ERTE, y también se cierren las cuestiones finales para la línea del BEI. “Se trata de medidas muy importantes porque siempre es bueno tener medidas alternativas de financiación cuando uno tiene una situación presupuestaria como la que nosotros tenemos en este momento”, subrayó.

La ministra defendió que, al tratarse de una crisis que “afecta sin atender a las fronteras”, es preciso reaccionar “conjuntamente” a nivel europeo y que la actuación tiene que ir más allá de esas tres redes de financiación.

Abogó por reforzar los programas estructurales y crear un fondo de reconstrucción ambicioso. Ahora mismo está pendiente de que la Comisión Europea formule su propuesta y Calviño dijo que debe tener “magnitud suficiente” para financiar una reconstrucción de una Europa donde en estos momentos se prevé una contracción del 7% del PIB por el coronavirus.

Ahí el Gobierno pide además que la ayuda se haga por transferencias, ya que “la salida de esta crisis no puede ser un aumento de los niveles de endeudamiento de los países aún superior de lo que teníamos antes de la crisis”, explicó.

Según Calviño, sus recursos deberán ir además a inversiones y sectores que sean clave para nuestro rendimiento potencial y la productividad, como la educación, la formación profesional, la digitalización o el cambio climático. Por último, Calviño reclamó unidad para pelear con peso en Europa. “Hay que estar muy unidos en Europa, que no haya voces que generen duda sobre el papel que puedan tener que jugar España en las instituciones comunitarias”, clamó.

(SERVIMEDIA)
14 Mayo 2020
ECR/mjg