Según informaron este viernes ambos cuerpos policiales, el destino de estos cargamentos de droga solían ser las comunidades de Madrid, Galicia o Asturias, así como localidades del sur de Francia.

La operación se ha saldado con 15 detenidos y un investigado. Además, en los nueve registros efectuados se ha intervenido una importante cantidad de lingotes de oro, plata y piedras preciosas valorada en más de 2.000.000 euros. También se han localizado documentos que acreditan la compra de más de medio millón de acciones de empresas en el extranjero, 20 armas de fuego con abundante munición y más de media tonelada de hachís, entre otros efectos.

Las primeras pesquisas tuvieron lugar el pasado verano, cuando se tuvo conocimiento de que varios individuos estaban planeando introducir un cargamento de hachís desde Marruecos hasta un punto de costa malagueña.

COÍN: CENTRO DE OPERACIONES

Paralelamente, el pasado mes de julio, la Policía Nacional inició una investigación en torno a una organización que estaba operando en la provincia de Málaga. Sus integrantes -de nacionalidad española, marroquí y brasileña y residentes en las localidades de Marbella, Mijas y Monda- se estaban dedicando al narcotráfico, principalmente hachís, desde Marruecos hasta España utilizando para ello vehículos caleteados.

En el transcurso de las pesquisas, los agentes de ambos cuerpos policiales se percataron que se encontraban investigando a las mismas personas decidieron aunar esfuerzos y trabajar conjuntamente en una única operación. Fruto de esta investigación conjunta se constató que el grupo criminal contaba con un domicilio ubicado en el término municipal de Coín (Málaga), que era utilizado como 'guardería' y desde donde se distribuía la droga.

En una primera fase de explotación se actuó contra la rama de la organización que se dedicaba a la vigilancia y al transporte de la droga que se encontraba en esta vivienda de Coín. Posteriormente se procedió al registro del inmueble utilizado como 'guardería' de la droga. En su interior se hallaron, entre otros efectos, varios fardos de hachís y un arma de fuego. En ese momento fueron detenidas otras dos personas por su presunta implicación en los hechos.

A raíz de estas detenciones, la investigación se centró en los miembros del grupo criminal asentados en las provincias de Málaga y Lugo, los cuales se dedicaban a suministrar sustancias estupefacientes a otras organizaciones delictivas asentadas en Galicia y Francia. Asimismo, también se interceptó un nuevo envío de droga, deteniendo en esta ocasión a cuatro personas e incautando 356 kilogramos de hachís y 103 kilogramos de marihuana.

Tras las detenciones y aprehensiones anteriores, y una vez identificados al resto de los integrantes del grupo investigado, se procedió a realizar la última fase de la operación, en ella los agentes llevaron a cabo ocho registros domiciliarios y detuvo a ocho personas en las provincias de Lugo y Málaga.