Tráfico hizo esta consideración después de que este lunes se iniciara la fase 0 del plan de desescalada por la crisis del coronavirus, con la que los ciudadanos irán abandonando el confinamiento obligado en sus casas para volver a la "nueva normalidad", como denomina el Gobierno el momento en que se abandone la cuarentena para frenar el Covid-19.

La desescalada supone reactivar ciertas actividades económicas, algunas de ellas con un impacto directo en la movilidad de las personas. Con casi todo el país en la fase 0 de ese periodo de transición, la DGT indicó que las empresas pueden estudiar la inclusión de "la flexibilidad horaria, el teletrabajo o alguna nueva medida en sus planes de movilidad que eviten la congestión en las carreteras, la pérdida de tiempo de los ciudadanos y la contaminación".

Además, Tráfico subrayó que la capacidad y el espacio disponible en los transportes públicos está "limitado" a supuestos que recoge una orden del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana para garantizar que los desplazamientos se hagan con seguridad y evitando la transmisión de la enfermedad entre los pasajeros.

"Esta situación puede provocar el aumento del transporte privado y que, a medida que se avance en las fases de desescalada, nos encontremos con un elevado grado de congestión sobre todo en los accesos de las ciudades", apuntó la DGT.

Según los datos de la DGT, los desplazamientos de coches y motos por carretera registraron este lunes un descenso del 61,7% respecto a otro día equivalente sin estado de alarma, pero inferior al del lunes de la semana pasada (66,2%).

Este ligero incremento de los desplazamientos también es visible en las horas punta de entrada a Madrid. Entre las 6.00 y las 10.00 horas de este lunes hubo un 10% más movimientos de vehículos respecto a esa misma franja horaria del lunes de la semana pasada.