Según informó este martes el Instituto Armado, los detenidos en la llamada 'operación Gafra' se centraban en vehículos de gran tonelaje mientras circulaban en el tramo de Huesca de las carreteras N-II y AP-2.

Cuando los conductores salían de los camiones, los arrestados usaban el método de 'los loneros', consistente en rajar las lonas de los vehículos o abrir los remolques para apropiarse de la mercancía. Posteriormente cargaban lo robado en un vehículo y regresaban a sus lugares de residencia, donde escondían los objetos sustraídos.

Como integrantes de estos dos grupos delictivos han sido detenidas 14 personas -11 hombres y 3 mujeres- de entre 30 y 57 años y vecinos de las localidades catalanas de Barcelona, Sant Adriá de Besós, Terrasa, Badalona y Hospitalet de Llobregat. A los arrestados se les acusa de los delitos de pertenencia a organización criminal, robo con fuerza en las cosas y receptación.

Se han llevado a cabo nueve registros en domicilios y naves industriales donde se han recuperado numerosos efectos, valorados en 72.000 euros. Hasta el momento se han esclarecido un total de 27 robos cometidos por las dos bandas desarticuladas.

MERCANCÍAS EN TRASTEROS

La investigación se inició en febrero de 2019, tras tenerse noticia de robos en camiones mientras permanecían estacionados en áreas de servicio de la provincia de Huesca. Tras las primeras indagaciones se pudo determinar que había, al menos, dos grupos delictivos distintos que se desplazaban desde Barcelona para cometer los hechos delictivos.

Posteriormente, los agentes comprobaron que todos los miembros de esta organización residían en esa provincia y que, tras cometer los robos, depositaban las mercancías robadas en diversos trasteros de un polígono industrial de la localidad de Sant Adriá de Besos hasta su venta. Parte de los objetos robados se los llevaban a sus domicilios junto con las herramientas que utilizaban.

Asimismo, se observó que para cometer los robos utilizaban como mínimo un turismo y una furgoneta para cargar la mercancía y que conocían la ubicación de las cámaras de video-vigilancia, ya que en todas sus actuaciones intentaban eludirlas.

Ante la gravedad de los hechos, la alarma entre los transportistas que realizaban sus paradas en estas estaciones de servicio, así como entre las empresas del ramo, y una vez localizados todos los lugares y personas de interés, se procedió el pasado 25 de febrero a la explotación de la 'operación Gafra' que culminó con la detención de 14 personas.