Según informó el IMEO a través de un comunicado, la lista de los alimentos “indispensables” a la hora de adquirir alimentos para un periodo “más largo que el habitual”, debe tener en cuenta los “requerimientos nutricionales específicos” de niños y personas mayores, además de embarazadas. Esta debe incluir cereales, legumbres, verduras y hortalizas, frutas y frutos secos, carnes y productos curados o en salazón, pescados y mariscos, aceite y vinagre, lácteos café o especias.

Para el portavoz del instituto, Rubén Bravo, un “error común” es que se compra “casi la totalidad” de los alimentos congelados y ultraprocesados, asociados a una fecha de caducidad más amplia. “No hay que olvidar que muchos de estos productos utilizan como conservadores altas cantidades de sal, azúcar añadido o grasas saturadas que son perjudiciales para la salud”, señaló la respecto.

Por lo que se refiere a las necesidades nutricionales de los niños pequeños o en edad de crecimiento, la experta en nutrición gestacional y pediatrica de Imeo, Estefania Ramo, advirtió de que el proceso de crecimiento requiere un "aporte abundante de nutrientes". "A diferencia de las ingestas de un adulto, los niños precisan consumir más nutrientes en una cantidad menor de calorías", abundó, al tiempo que recomendó asegurar su consumo de cereales, frutas, verduras y lácteos y una "ingesta adecuada" de ácidos grasos esenciales y proteínas de alto valor biológico.

Con respecto a los requerimientos nutricionales específicos en el caso de personas mayores, afirmó que nutrientes como proteínas de alto valor biológico, calcio, vitamina D, ácidos grasos omega 3, entre otros, tienen un "papel fundamental" en un envejecimiento saludable.