Coronavirus

Los psicólogos piden "ser honestos" con los niños y explicar la crisis del coronavirus sin alarmismos

- También invitan a dar tareas a los niños sin clase y “dejar tiempo para el aburrimiento”

MADRID
SERVIMEDIA

El Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid recomendó este viernes “ser honestos” con los niños sobre la crisis del coronavirus sin caer en alarmismos, al tiempo que animó a los padres a dar tareas a los que tienen las clases suspendidas, así como aprovechar para pasar más tiempo juntos, jugar al aire libre e, incluso, aburrirse.

“Es importante planificarse con antelación e informarles” de las razones por las que no están yendo al colegio, recomendaron los psicólogos en un comunicado publicado este miércoles y dirigido a las familias que han visto suspendidas las clases, como ocurre en Madrid, Vitoria y La Rioja, donde existen importantes focos de coronavirus.

Por tanto, las recomendaciones de los psicólogos pasan por “mantener los horarios y hábitos familiares, evitando que esta situación altere el orden, estructura y seguridad que dan las rutinas”. No obstante, aseguraron que es positivo “promover tiempo para el juego libre, deporte, movimiento corporal, incluso dejar tiempo para el aburrimiento”.

También recomendaron “diferenciar entre los horarios y rutinas de un día entre semana de los del fin de semana” y “aprovechar esta situación para pasar más tiempo de disfrute y ocio en familia, algo tan necesario y escaso habitualmente”.

Estas recomendaciones están adaptadas para niños y niñas de cuatro a 10 años, ya que en edades más tempranas “la idea es más abstracta y requiere de una adaptación más sencilla”. Sin embargo, a partir de los 10 “comprenden conceptos más complejos, sin necesidad de realizar adaptaciones tan concretas como en esta etapa evolutiva”.

Por tanto, los expertos sostienen que “conviene adaptar también la información que traslademos” a la hora de explicar los cambios en su vida, como el hecho de no poder ir a clase. “Debemos darle la importancia que merece a la prevención de la transmisión del virus y las medidas de higiene, reduciendo también situaciones de alarma que afecten a los menores”, indicaron.

El primer paso es informarles acudiendo a fuentes oficiales y buscar información contrastada por expertos, como el Ministerio de Sanidad, colegios profesionales sanitarios u organismos oficiales como la OMS. También conviene “preguntarles qué información saben, posibles dudas o temores relacionados con el virus”, así como por “información errónea que han escuchado o malinterpretado”.

En este sentido, recomendaron “aclararles todas las dudas que puedan tener de manera sencilla y transmitiéndoles calma y seguridad”. De hecho, no hay que esperar a que pregunten ellos para hablarlo.

NO OCULTAR INFORMACIÓN

Asimismo, pidieron no ocultarles información y “ser sinceros en cuanto a que se trata de un virus peligroso porque se contagia con facilidad, y por lo tanto debemos protegernos de él”. También conviene informarles de los síntomas más frecuentes (fiebre, tos y sensación de falta de aire) y de que la mayoría de los casos se recuperan (80%), así como que las personas mayores son las más vulnerables.

También aseguraron que es necesario “dar seguridad y confianza informándoles de que hay muchos profesionales sanitarios para curar, entender el virus, reducir sus riesgos y encontrar una vacuna”.

Para todo ello es esencial “utilizar un lenguaje adaptado a su edad y a sus conocimientos”, siendo conscientes de que “si no se lo explicamos bien recurrirán a argumentos fantasiosos para compensar la falta de información”.

También aconsejaron hablar con frecuencia sobre el tema, pero “sin saturarles con demasiada información” y normalizar que se hable sobre ello sin que sea un “tema tabú”, pero evitando referencias a las personas que están muy enfermas o han fallecido.

Y es que hay que “ser honestos y evitar largas explicaciones, respondiendo a sus dudas o miedos que puedan tener” y “transmitir que pueden expresar sus dudas y confiar en nosotros”, aunque “si no tenemos todas las respuestas, quizás podamos buscar respuestas juntos”.

Por último, advirtieron de la necesidad de que los adultos sean ejemplo para ellos, pues “aunque no nos demos cuenta, nos están mirando y aprendiendo, demos un ejemplo de medidas preventivas de higiene y salud y de calma”.

(SERVIMEDIA)
11 Mar 2020
GIC/mjg