Investigadores españoles descubren que el hígado graso es diferente en cada sexo

MADRID
SERVIMEDIA

Una investigación llevada a cabo por científicos españoles concluyó que el hígado graso es diferente en cada sexo. Del estudio en modelo animal se desprende que los animales de sexo femenino mostraban niveles más bajos de expresión hepática de la proteína que determina el crecimiento de las gotas de grasa.

En la investigación participaron el jefe de grupo del CIBER de Obesidad y Nutrición (CIBEROBN), Jesús de la Osada, coordinador del equipo del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular y Celular de la Universidad de Zaragoza junto con el Departamento de Biología Celular, Fisiología e Inmunología de la Universidad de Córdoba e investigadores del Instituto de Investigaciones Biomédicas Alberto Sols del CSIC y de la Universidad Autónoma de Madrid.

Teniendo en cuenta que en estudios previos descubrieron que la proteína Cidec/Fsp27, encontrada con anterioridad en el tejido adiposo, estaba asociada a los cambios en el contenido de la grasa hepática los investigadores decidieron dar un paso más en su estudio abordando su expresión hepática en diferentes condiciones dietéticas y en ambos sexos.

Tras alimentar durante once semanas a animales de ambos sexos con dieta occidental, rica en colesterol y grasa saturada de palma observaron que los animales de sexo femenino mostraron niveles más bajos de expresión hepática de la proteína Cidec/Fsp27, que es la que determina el crecimiento de las gotas de grasa hepática, que los de sexo masculino cuando fueron alimentados con dietas occidentales, según informa la Universidad de Zaragoza.

Este resultado se tradujo en una menor cantidad de Cidec/Fsp27 en gotas de lípidos y microsomas. Los investigadores pudieron demostrar que son las hormonas del ovario las responsables de este fenómeno ya que desaparecía tras el proceso de castración.

Además, durante el estudio los investigadores comprobaron también que una proteína supercontroladora denominada PGC1a está también implicada ya que, en los animales que carecían de ella, comprobaron que desaparecían las diferencias de sexo en la expresión de Cidec/Fsp27.

“Estos resultados ponen de manifiesto que la expresión hepática de Cidec/Fsp27 tiene una regulación compleja influenciada por la dieta y el entorno hormonal sexual y que las diferencias de sexo están controladas por la proteína PGC1a”, explica Jesús de la Osada.

Los investigadores consideran que el hallazgo supone “un paso más” en la medicina personalizada, porque introduce la variabilidad entre sexos en el tratamiento del hígado graso, una acumulación anómala de ciertas grasas en el interior de las células hepáticas.

Según datos de la Universidad de Zaragoza, el hígado graso no alcohólico está alcanzando prevalencias del 30% en ciertas poblaciones occidentales. Esta “alta incidencia” está originada por una alta ingesta de grasa saturada o/y azúcares refinados. Entre las consecuencias, destacan una “interrupción del metabolismo hepático, originando el desarrollo de un amplio abanico de enfermedades metabólicas como diabetes, obesidad, esteatosis hepática y enfermedades cardiovasculares”.

(SERVIMEDIA)
09 Mar 2020
ARS/gja