Es la primera vez que estas conductas machistas serán penalizadas si la víctima denuncia porque antes sólo se contemplaba en violencia doméstica o entre familiares o ex parejas.

Además todas las relaciones sexuales sin consentimiento expreso de la mujer serán consideradas agresiones sexuales con penas de uno a cuatro años de prisión.

Este anteproyecto de ley que incluye modificaciones del Código Penal y afecta a cinco ministerios, Igualdad, Justicia, Interior, Educación, Sanidad y Defensa ya que también contempla cambios en el Código Penal Militar, comienza hoy su andadura pero no llegará al Congreso de los Diputados hasta finales de año como pronto, según fuentes de Igualdad.

El anteproyecto, cuya piedra angular es el consentimiento dice que "se entenderá que no existe consentimiento cuando la víctima no haya manifestado libremente por actos exteriores concluyentes e inequívocos, conforme a las circunstancias concurrentes, su voluntad expresa de participar en el acto".

Asimismo, considera "agresión sexual los actos de contenido sexual que se realicen empleando violencia, intimidación o abuso de una situación de superioridad o vulnerabilidad de la víctima, o actuando de manera sorpresiva, así como los que se ejecuten sobre personas que se hallen privadas de sentido o de cuya situación mental se abusare y los que se realicen cuando la víctima tenga anulada su voluntad por cualquier causa".

Otra de las innovaciones que presenta la nueva norma es que se paralizarán las expulsiones de mujeres inmigrantes si denuncian haber sufrido agresión sexual, así como la creación de juzgados específicos para las violencias sexuales.