Desde el año 2013, cuando la asistencia a salas de cine cayó hasta los 76,9 millones de espectadores, el cine ha experimentado un crecimiento año tras año y ha recuperado ya los cerca de 30 millones de asistentes que se perdieron hasta 2013. De hecho, el crecimiento en la asistencia supone el mejor dato de evolución de los principales países europeos.

De hecho, el año pasado se crearon 153 pantallas nuevas y el sector invirtió más de 100 millones de euros a abrir nuevas salas de cine. “Cada vez son más el número de españoles que visitan las salas de cine al menos una vez al año”, celebró la federación.

Según la Federación de Cines de España, el precio medio de la entrada de cine es de 5,91 euros, un precio por debajo de la media europea, que se sitúa en los 6,28 euros.

Como ya señaló la encuesta de hábitos y prácticas culturales en España publicada por el Ministerio de Cultura, la asistencia a salas de cine se ha incrementado en 3,8 puntos en los últimos cinco años, pasando del 54% en 2014 al 57,8% en 2019, por encima de la media europea.

Además, ir al cine es la principal actividad de ocio cultural realizada por los españoles fuera del hogar. El año pasado las producciones con mayor facturación en España fueron ‘El Rey León’, con 37 millones de euros, y ‘Padre no hay más que uno’, con 14 millones.