Esta entidad con carácter social y sin ánimo de lucro, cuyo objetivo es dar respuesta a las necesidades más inmediatas de la naturaleza social de los miembros de la profesión médica y sus familias, mostró su apoyo a la educación con, entre otras cosas, ayudas a huérfanos menores de 21 años, prórrogas para finalizar el curso cumplidos los 21 años, becas para estudios oficiales y expedición de títulos oficiales.

En concreto, la Fundación concedió 351 becas en el curso 2018-2019. De estas, 314 fueron para estudios superiores, 5 de estudios superiores para huérfanos absolutos, 3 becas superiores para huérfanos de padre y madre médicos, 24 becas para estudios medios, 4 becas para estudios varios y 1 beca de estudios varios para huérfanos de padre y madre médicos.

De los 351 becados, 67 fueron huérfanos que estudian medicina, lo que supone un 19,08% del total.

Por otro lado, la Fundación convoca los Premios Jesús Galán a los mejores expedientes académicos con la finalidad de poner en valor el trabajo y la dedicación al estudio académico que realizan los huérfanos de médicos acogidos en la Fundación.

“La educación es un bien necesario para cualquier persona en la sociedad, imprescindible para el crecimiento personal y profesional de los individuos. Muchos niños y jóvenes tienen dificultades para costear sus estudios tras pasar por situaciones tan difíciles como la pérdida de uno de sus padres u otras circunstancias. Por eso, para la Fpsomc es vital apoyar a las personas en estas situaciones de especial vulnerabilidad, para garantizar su acceso igualitario a la educación”, señala el presidente de la Fpsomc, Serafín Romero.