Según recordó el gobierno regional este jueves, dicho programa se impulsó para dar respuesta a algunas de las medidas adoptadas por los Jueces de Menores como consecuencia de los delitos cometidos en el ámbito familiar por conductas violentas de los hijos contra sus progenitores.

Su desarrollo tiene lugar en el Centro de Ejecución de Medidas Judiciales “El Laurel”, uno de los seis centros de titularidad pública que gestiona el Arrmi, y cuenta con un marcado enfoque socio-educativo-terapéutico, gracias también a la colaboración de la Clínica Universitaria de Psicología de la Universidad Complutense.

La intervención educativa y terapéutica con estos menores infractores prioriza el trabajo con la familia como uno de los factores fundamentales en los comportamientos violentos de estos chavales.

Desde la puesta en marcha del programa hace doce años, en la Arrmi ha atendido a 552 menores con medidas de internamiento por delitos de maltrato familiar, 62 de ellos en el 2019.

Un 32,6% del total de participantes son chicas, frente al 13-16% de población femenina que cumple medidas judiciales de internamiento en los seis centros adscritos a la agencia, y la edad de los chichos se sitúa en los 16 años.

EL 10% DE LAS MEDIDAS JUDICIALES SON POR VIOLENCIA EN LA FAMILIA

Según detalló el gobierno regional, de las 959 medidas judiciales de medio abierto y reparaciones judiciales, un total de 103 o el 10,74% ha estado vinculadas con el maltrato familiar ascendente (maltrato habitual, amenazas en el ámbito familiar o violencia doméstica).

Durante el año 2018, la Comunidad de Madrid atendió a través de la Arrmi a 2.878 menores, en ejecución de 3.417 medidas judiciales, de los que cerca de un 22% son en el ámbito de internamiento y el 78 % con medidas judiciales de medio abierto y reparaciones extrajudiciales.

Además, en ese ejercicio, 567 menores y jóvenes participaron en acciones formativas de inserción sociolaboral impulsadas por la agencia y se formalizaron 265 contratos de trabajo, lo que supuso un incremento respecto al ejercicio 2017 superior al 18%.

A día de hoy, la agencia Arrmi atiende simultáneamente a 1.180 menores y jóvenes, de los cuales el 80% cumplen medidas judiciales de medio abierto no privativas de libertad, y el 20% restante cumplen medidas judiciales de internamiento.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Madrid es la región con la tasa más baja de infracciones penales cometidas por menores de entre 14 y 17 años por cada 1.000 habitantes. En concreto, en 2018 su tasa era del 7,4‰, un 43,08% inferior a la media nacional.

Además, es la comunidad con la tasa más baja de menores condenados por cada 1.000 habitantes, con un porcentaje del 4,4‰ en 2018, un 39,73% por debajo de la media nacional.