Desde que el pasado viernes, día 4, ambos líderes intervinieran juntos en un acto con representantes del mundo de la cultura, se especuló con la posibilidad de que Almunia y Frutos volvieran a coincidir en otro acto de campaña para movilizar al electorado de izquierda indeciso.

Para esta segunda ocasión, se especuló con la posibilidad de montar un encuentro respaldado por el mundo del sindicalismo. Sn embargo, desde UGT y CCOO no se vió del todo bien tal posibilidad y, ayer, PSOE e IU descartaron organizar el acto con sindicalistas que acudirían a título personal.

La coalición de izquierdas no estaba muy conforme con la organización de dicho evento, al considerar que "dirigirse a los sindicatos era como pescar en una pecera, cuando lo que hay que hacer es dirigirse a los sectores sociales dudosos y críticos con el acuerdo".

Además, en cuanto Cándido Méndez (UGT) y Antonio Gutiérrez (CCOO) deidieron que no asistirían a un acto político de esas características, para mantener su independencia respecto a las formaciones políticas, PSOE e IU vieron que ese acto "no tenía sentido".

Entonces, IU propuso al Partido Socialista la posibilidad de que Almunia y Frutos participaran a pocas horas del cierre de campaña en un acto con jóvenes en alguna universidad, ya que ese sector de la sociedad, potencial votante de izquierdas, todavía no se ha movilizado.

Como Frutos tenía mañana por la mañana n su agenda una charla-coloquio con universitarios en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma, IU intentó convecer, sin éxito, al PSOE, para que Almunia asitiera al acto y pidieran los dos su apoyo a los jóvenes.

Finalmente, y tras muchas conversaciones entre Cipriá Ciscar y Víctor Ríos, coordinadores de campaña de PSOE e IU, respectivamente, se optó por la comparecencia ante los medios de comunicación en un hotel madrileño.