Lo hizo en declaraciones en los pasillos del Congreso minutos antes de iniciarse la sesión de apertura de la legislatura, después de que Vox rechazara quedarse con un puesto en la Mesa cediendo uno a Ciudadanos y exigiera que ese puesto se lo brindara el PP. Con este rechazo, si el PSOE, Unidas Podemos y los nacionalistas coordinaran sus votos, el partido de Santiago Abascal se quedaría sin puesto en el órgano rector de la Cámara pese a ser el tercer grupo parlamentario más numeroso.

“SI Vox decide no participar en esa fórmula, significará que se autoexcluyen, incluso cediendo su sitio a la izquierda”, interpretó Montesinos, añadiendo que entonces “son ellos quienes tienen que dar explicaciones, porque el PP ha hecho todo lo posible para que el centro derecha esté representado” en la Mesa.

El portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, confirmó instantes después, también en los pasillos, que sus 52 diputados votarán a sus propios candidatos a la Mesa, descartando implícitamente una concertación de sus votos con el PP para garantizarse un puesto en ella.

El presidente del PP, Pablo Casado, terció después que el PP ha sido el único partido que ha "roto el cordón sanitario" y que espera que "no sean otros partidos los que coloquen el cordón sanitario a otros", en alusión al que Vox le estaría imponiendo a Ciudadanos al no aceptar la fórmula ofrecida por los populares.