Este gasto ha sido motivo de controversia en la Cámara Baja y ha provocado las quejas de los funcionarios de la casa, pues lo consideran “innecesario” y se produce justo el año en que el Gobierno ha rebajado el salario de los trabajadores públicos en un 5% de media.

Así lo hizo constar la plataforma sindical del Congreso de los Diputados en la reunión que la Junta de Personal de esta institución celebrada el pasado 15 de diciembre.

Los representantes de los trabajadores manifestaron su "malestar" y "desacuerdo" con el "innecesario gasto de más de 21.000 euros en iluminación navideña", que además tachan de “dudoso gusto estético”.

"No entendemos que se esté aludiendo al esfuerzo de todos y la austeridad en aspectos fundamentales de nuestras condiciones laborales y que se permitan, después, gastos superfluos pero elevadísimos, como éste", dicen los funcionarios en una carta que enviaron a la Mesa y a la que tuvo acceso Servimedia.

RECORTE SALARIAL

El pasado 25 de mayo, la Junta de Portavoces del Congreso aprobó por unanimidad recortar en un 10% el sueldo base de todos los diputados y acordó la traducción de la rebaja en las retribuciones que reciben anualmente los funcionarios de las Cortes Generales, que tienen su propio régimen de escalas, distinto al de sus compañeros del resto de la Administración.

Tras asignar a cada escala laboral una reducción proporcional, la Cámara Baja proclamó que la reducción salarial cumplía con el objetivo de rebajar el sueldo un 5% de media a funcionarios y personal laboral.

Con posterioridad, el Congreso de los Diputados aprobó en septiembre un presupuesto para 2011 por importe de casi 92 millones de euros, lo que supone una reducción del 6,6% con respecto al actual ejercicio.

La partida destinada a retribuciones y remuneraciones de diputados es la que más merma sufre, con una reducción del 10%. Los recortes de retribuciones del personal laboral y eventual suponen casi un 8%.

Dentro de la reducción general del 6% que alberga el capítulo II, destinado a gasto en bienes corrientes y servicios, destacaban los recortes del 40% en la partida de atenciones protocolarias y representativas, del 20% en la partida de viajes y delegaciones oficiales en el extranjero y del 16% en la destinada a dietas.

El Congreso de los Diputados también decidió reducir un 5% el crédito para subvención a los grupos parlamentarios, en línea con decisiones ya adoptadas anteriormente por la Mesa de esta institución.

Por último, se contemplaba la reducción en un 6% del capítulo de inversiones reales, sin afectar sustancialmente a las necesidades de modernización en el funcionamiento de la Cámara Baja.

También dentro de esa política de austeridad, el Congreso optó por recortar al máximo el gasto en los presentes que se regalan a los ciudadanos en la Jornada de Puertas Abiertas que la Cámara Baja celebra desde 1997.

Este año se obsequió a los visitante con una escueta bolsa de compra reutilizable, cuando en jornadas anteriores se entregaban mochilas, e incluso "pendrive".

Por eso, los funcionarios de la Cámara Baja no entienden la decisión de incurrir en un nuevo gasto, que no se había realizado en ejercicios anteriores, cuando además se están recortando múltiples partidas de gasto, en especial la dedicada a retribuciones.