Celaá comentó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el Gobierno trabaja en facilitar la transición ecológica hacia "un mundo nuevo, más limpio, más descarbonizado y a pleno pulmón", motivo por el que ha acogido "con entusiasmo" la organización de la Cumbre del Clima. "Estamos seguros de que la COP25, la Cumbre del Clima Chile-Madrid, será un éxito", sentenció.

Por otro lado, la ministra para la Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, subrayó en esa rueda de prensa que la posición de España en las negociaciones climáticas se enmarcan dentro de la posición de la UE y que la singularidad de la Cumbre del Clima de este año es que es país anfitrión, pero no asume la Presidencia.

"No lideramos la negociación, como sí corresponde hacerlo a Chile pero en nuestra calidad de anfitriones hemos sugerido que se refuercen algunos temas que nos parecen importantes y que, por otra parte, están respaldados por la sociedad y diría que por el conjunto de los países, como son las cuestiones relativas a educación ambiental, a transición justa y, por tanto, elementos asociados a equidad social y justicia climática", explicó.

Ribera destacó que la Cumbre del Clima que se celebrará en Madrid debe reforzar la idea de que "es tiempo para la acción" porque cuando concluya apenas quedarán poco más de dos semanas para que comience 2020, año en que los países deben reforzar al alza sus contribuciones de reducción de gases de efecto invernadero, tal y como recoge el Acuerdo de París.

Así, Ribera deseó que la Presidencia chilena de la COP25 pueda "liderar una alianza por una acción reforzada" para incrementar la ambición climática con el fin de que "cuando el año que viene toque dar el pistoletazo de salida oficial todo el mundo haya hecho los deberes y haya empezado a revisar al alza sus contribuciones".

No en vano, añadió que las promesas climáticas de los países están "lejos" de cumplir el principal objetivo del Acuerdo de París, que es limitar el calentamiento del planeta a 2ºC respecto a los niveles preindustriales o incluso reducirlo a 1,5ºC.