Valerio hizo estas declaraciones durante la entrega del 'Premio Cermi.es 2019' en la categoría Fundación Cermi Mujeres-Acción en Beneficio de las Mujeres con Discapacidad, concedida por el Cermi Estatal a la “progresiva presencia de mujeres con discapacidad en la vida política e institucional, desempeñando responsabilidades públicas”. Junto a Valerio, la alcaldesa de Villamuelas (Toledo), Carolina Alonso, también recogió este premio.

Además, el jurado premió a la directora general de Personas con Discapacidad de la Junta de Andalucía, Mercedes López, y a la exsenadora Virginia Felipe. Según recoge el fallo, “son cuatro ejemplos que encarnan a las mujeres con discapacidad en política, ya que representan la diversidad, tanto por tipo de discapacidad, nivel de poder (nacional, autonómico y local) y adscripción ideológica”.

En su intervención, Magdalena Valerio aseguró sentirse “honrada” y “agradecida” por este premio, que dedicó “a todas las personas con discapacidad que viven con una discapacidad y que tienen el reto de superarse cada día”, así como a las mujeres que cuidan de personas con discapacidad o en situación de dependencia. “Quiero que este premio sea un empuje para apostar por el quiero y por el puedo”, exclamó.

Ante más de 300 mujeres y niñas con discapacidad procedentes de toda España, la ministra en funciones compartió su trayectoria profesional y su experiencia como persona con discapacidad en primera persona, a consecuencia de poliomielitis a comienzos de la década de los 60 y tras un cáncer de mama hace cinco años.

Por otro lado, la titular de la cartera de Trabajo repasó algunas de las medidas que se han aprobado durante el Gobierno de Pedro Sánchez, como es incluir en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) la posibilidad de que las personas con discapacidad sobrevenidas que sean autónomas puedan acogerse a los incentivos ya existentes para personas que tengan discapacidad antes de iniciar su trayectoria por cuenta propia.

Asimismo, anunció que el Consejo de Ministros debatirá este viernes la subida de un 5% en las ayudas que reciben los centros especiales de empleo para personas trabajadoras con grandes discapacidades, con el fin de compensar el impacto del incremento del salario mínimo interprofesional (SMI), pasando del 50% actual al 55%.

EMPODERAMIENTO

El acto de entrega fue clausurado por la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, quien declaró que su Gobierno es feminista” y cree “en la igualdad en el significado más amplio de la palabra”. “El empoderamiento de las mujeres, incluidas las mujeres y niñas con discapacidad, está presente de manera transversal en la acción de este Gobierno. Además, quienes excluyen han de saber que nos tendrán en frente”, aseveró.

Chivite situó como prioridad de su Ejecutivo la lucha contra la violencia machista y afirmó que Cermi Navarra y Cermi Mujeres podrán contar con el Gobierno foral “como aliado siempre”.

La ministra en funciones y la regidora de Villamuelas recogieron el galardón durante el III Foro Social de Mujeres y Niñas con Discapacidad, que se celebra en el Hotel NH Pamplona Iruña Park, en Pamplona, y que ha sido organizado por Cermi Navarra y Cermi Mujeres, con el apoyo de las entidades miembro del Cermin y del Cermi Estatal. El encuentro, que lleva por lema 'Unidas en la diversidad', ha contado con la financiación del Gobierno de Navarra, el Ministerio de Sanidad, consumo y bienestar social, Grupo Red eléctrica, Fundación Repsol, el Ayuntamiento de Pamplona y Obra social 'La Caixa'.

Durante el foro, se celebró también la conferencia marco 'Cómo abordar la diversidad de las mujeres y niñas con discapacidad desde un enfoque interseccional’, impartida por la docente investigadora en la Universidad de Deusto (Bilbao) Natalia Flores.

Esta experta explicó que todas las mujeres “son un grupo homogéneo e igualmente desaventajado en las estructuras de poder”, por lo que defendió incorporar la mirada de la 'interseccionalidad' para entender las distintas opresiones y atender “a quiénes nos estamos dejando fuera de estas reivindicaciones”.

En este sentido, Flores indicó que el feminismo debe incorporar la experiencia de todas las mujeres con discapacidad porque es “un hecho ampliamente contrastado que existen múltiples discriminaciones y una notable diferencia entre mujeres con y sin discapacidad, así como con respecto a los hombres”. “A las mujeres con discapacidad no se nos define ni se nos ve”, denunció. Eso sí, durante el debate generado tras la ponencia, se evidenció que la colaboración entre el movimiento feminista y de mujeres con discapacidad cada vez es más fuerte porque todas las mujeres comparten una situación de desigualdad con respecto a los hombres.

“Es momento de escuchar y dar voz a las personas con discapacidad, fomentar las relaciones de poder horizontales con las mujeres con discapacidad en la búsqueda de conocimiento”, afirmó esta experta, que definió el feminismo como “la visión de ir analizando las capas de discriminación que sufren las mujeres en función de sus diferentes circunstancias: la discapacidad, el lugar de procedencia, etc”.