ANGUITA VE "SÍNTOMAS DE DISGREGACIÓN" EN EL PARTIDO COMUNISTA

MADRID
SERVIMEDIA

El ex coordinador general de IU, Julio Anguita, ve "síntomas y evidencias de disgregación" en el PCE. Entre otros motivos, cree que el hecho de que la Fiesta del PCE no se celebre en Madrid es "una expresión, más que simbólica, de un proceso de disolución del PCE como fuerza vertebrada, organizada y con voluntad de presencia en toda España".

En un artículo publicado en Mundo Obrero, recogido por Servimedia, Anguita asegura que es posible que no hubiera otra solución al respecto, ya que las dificultades para mantener la Fiesta en su formato clásico habían aumentado.

No obstante, afirma que el PCE tiene su dirección federal en Madrid y que esta cuestión puede ser la expresión de un proceso de disolución del PCE como fuerza organizada y con voluntad de presencia en todo el territorio español.

Por este motivo, considera que éste es un buen momento para la reflexión, en el que es necesario "aclarar posiciones en torno al Movimiento Obrero y sus actuales organizaciones". De hecho, se pregunta si "no ha llegado el momento de debatir profundamente qué significa militar en la organización" y de abordar las causas de lo que denomina “esta miseria política”.

"Nos hemos transformado en una gigantesca casa de Bernarda Alba en la que todas y todos somos a la vez Bernarda, sus hijas, la abuela y la Poncia. Sobre nosotros planea constantemente el deseo-ausencia de Pepe el Romano, pero gana siempre la partida el miedo castrador y letal", aduce el ex coordinador general de IU.

A su juicio, es importante aceptar esta situación y enfrentarse sin miedo a la realidad, ya que, según dice, los resultados conseguidos hasta el momento han sido decepcionantes, como la redacción de un nuevo Manifiesto-Programa del Partido aprobada en el XVII Congreso y de la que todavía no se han obtenido resultados.

"Si lo que ha sucedido con el Manifiesto no merece una reflexión colectiva que conlleve una reacción de cambios profundos, es que hemos perdido la capacidad de respuesta", manifiesta Anguita en el artículo.

Asimismo, considera que esta es una ocasión para que “el PCE convoque a refundación y a rearme ideológico consecuente”. Pero, según comenta, es una decisión que implica "un nuevo compromiso, nuevas expectativas, y una entrada de sangre roja y nueva".

Anguita tiene en su artículo también palabras para Izquierda Unida. Cree que los militantes de este partido han preferido imputar el hecho de que muchos cargos públicos y algunos dirigentes sindicales hayan abandonado sus filas para incorporarse a otros partidos políticos a la existencia e IU "como si ésta fuera algo extraño, externo o superficial al PCE".

Además, añade que "la locura ha continuado cuando dirigentes de IU y también del Partido han caído en la misma operación de tramposo autoengaño imputando a su Partido los males de IU".

"Entre quienes concebían IU como una fuerza subalterna, quienes por reacción se acogían al quietismo del lugar sagrado y seguro de las esencias y quienes estaban condenados a escoger lo menos perjudicial, hemos gastado energías sin cuento", señala.

Por último, indica que tampoco faltan quienes han hecho de la militancia en los distintos niveles de dirección "una simple cuestión de apuntes contables en el debe y el haber que conforman el arqueo previo a las listas, asesorías y expectativas de destino".

(SERVIMEDIA)
13 Sep 2009
VCG/gja