Ello supone la renovación total de una Línea 6, que es la que más viajeros transporta al año, con más de 100 millones de usuarios.

Los trenes 8.400 son los más modernos de cuantos circulan por el Metro de Madrid, incorporan sistemas de protección y conducción automática de última generación CBTC (Communication-Based Train Control), permiten el transporte de bicicletas y son mejores también en accesibilidad y más respetuosos con el medio ambiente.

Aguirre, acompañada por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz- Gallardón, y el consejero de Transportes e Infraestructuras, José Ignacio Echeverría, realizó el viaje inaugural del primero de estos trenes y destacó que la llegada de estos trenes, con su avanzada tecnología, permitirá aumentar la capacidad de la línea hasta en un 30%, pasando de los 26.000 viajeros por sentido y hora que viajan actualmente en la línea hasta 34.000 pasajeros por sentido y hora.

Aguirre recordó que la Línea 6 se ha renovado totalmente gracias a un plan de modernización que se inició en el año 2003, y desde entonces, según explicó la presidenta, "se ha construido una nueva estación en Arganzuela-Planetario, se ha renovado buena parte del sistema de alimentación eléctrica y la iluminación de los túneles, se ha mejorado la ventilación de la línea y se ha sustituido la catenaria convencional por otra rígida y más fiable".

"También", añadió Aguirre, "se han modernizado muchas estaciones, con nuevos vestíbulos, escaleras mecánicas y ascensores que han mejorado la accesibilidad para personas con discapacidad".

Y es que, según destacó la presidenta madrileña, sólo en la presente legislatura hemos invertido más de 50 millones de euros en las estaciones de Sáinz de Baranda, Pacífico, Carpetana y Usera, que se unen a las ya renovadas entre 2003 y 2007".

En total, se incorporarán de forma progresiva 30 unidades de estos trenes que circularán a lo largo del año 2011 según vayan llegando a Madrid desde la fábrica de CAF en Zaragoza, donde han sido construidos, y superen las pruebas de circulación exigidas por Metro de Madrid para garantizar su calidad y fiabilidad.

La incorporación de cualquier nuevo modelo de material móvil a la red de Metro requiere de una serie de pruebas en circulación en las propias vías, así como los ajustes y mejoras necesarios para garantizar no sólo su correcto funcionamiento si no también la completa seguridad de los clientes.

ÁREA RESERVADA PARA BICICLETAS

El diseño del nuevo modelo de tren es diferente a los que actualmente circulan por la red, tanto en el exterior como en el interior. El 8.400 es un modelo de pasillo continuo de 109 metros de largo y con capacidad para 1.270 viajeros.

Además, cuenta con un espacio para dos sillas de ruedas para personas con movilidad reducida que, con sólo apretar un botón, podrán avisar al conductor de que quieren bajarse en la siguiente estación, lo que agilizará y facilitará su bajada.

Estos trenes permiten, además, llevar más de una bicicleta en un área reservada para este uso con la que se tratará de hacer más cómodo su transporte. Cambia también el color del suelo, que ha pasado a un rojo, y llevan asideros con varias barras aumentando así el número de personas que pueden sujetarse cuando van de pie.

Incorpora, además, aire acondicionado, sistema de anuncio a través de sonido y teleindicadores luminosos para informar a los viajeros de la siguiente estación y del lado de apertura de puertas; megafonía entre el conductor y los viajeros; carteles exteriores de línea y número de tren; pantallas de vídeo; sistema de videovigilancia con dos cámaras por coche; comunicación tren-tierra y control automático del tren por radio y por banda ancha sin cables y sistemas de emergencia, evacuación y detección y extinción de incendios.