Además, en los próximos 12 meses, según recordó Unicef en una nota, junto con aliados nacionales, planea llegar a un total de 1,2 millones de niños y niñas en escuelas públicas y concertadas de todo el país con suministros educativos.

Cada paquete de regreso a la escuela contiene una mochila escolar con útiles de aprendizaje esenciales que incluyen cuadernos, lápices y pinturas de colores, entre otros. Se están distribuyendo kits a estudiantes en los estados de Miranda, Distrito Capital, Bolívar, Zulia, Táchira, Carabobo, Portuguesa, Barinas, Apure, Falcón, Amazonas, Delta Amacuro, Anzoátegui, Sucre, La Guaira y Nueva Esparta.

También se están distribuyendo materiales de enseñanza y aprendizaje, kits de recreación y kits de educación de la primera infancia para apoyar aún más a los estudiantes y maestros.

"Es crucial que mantengamos a los niños en la escuela: entornos seguros donde puedan aprender, socializar e incluso acceder a servicios esenciales como la alimentación escolar", sostiene Herve Ludovic De Lys, representante de Unicef en Venezuela. “Las escuelas también brindan a los niños un sentido de normalidad que es vital dadas las dificultades que enfrentan muchas familias. Estos kits y materiales de aprendizaje para el regreso a la escuela brindarán a los niños y maestros las herramientas que necesitan para comenzar bien el año escolar”, agrega.

Para Bernt Aasen, director regional de Unicef para América Latina y el Caribe, "traer y mantener a cada niño en la escuela es siempre la inversión más poderosa, pero especialmente en tiempos inciertos como los que vive actualmente Venezuela".

Unicef también recuerda que el mes pasado solicitó 70 millones de dólares (63,28 millones de euros) para continuar satisfaciendo las necesidades más urgentes de niños, niñas, adolescentes y mujeres embarazadas en Venezuela. “Hasta ahora, solo se ha recibido el 9% de la financiación requerida”, denuncia.