Así queda de manifiesto en la 'Propuesta abierta de programa común progresista', compuesta por 370 medidas dimanantes de las 24 reuniones que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, mantuvo con organizaciones y expertos de la sociedad civil en agosto, con las que espera reunir los apoyos suficientes que garanticen su investidura.

En este documento el PSOE se compromete a desarrollar “actuaciones de reconocimiento y reparación de las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura”. Para ello, pretende declarar el 31 de octubre como día de recuerdo para todas las víctimas del franquismo”.

El programa electoral con que los socialistas concurrieron a las elecciones generales del pasado mes de abril ya apostaba por declarar el 31 de octubre como “día de recuerdo para todas las víctimas (de la Guerra Civil), coincidiendo con el aniversario de la aprobación de la Constitución Española”.

No obstante, colectivos como la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) han mostrado su desacuerdo sobre la elección de esa fecha, día en que se aprobó la Constitución de 1978 y la Ley de la Memoria Histórica, y apuesta por que esa efeméride se celebre el 18 de julio por ser el día en que tuvo lugar el golpe de Estado de 1936 que desencadenó la Guerra Civil y la posterior dictadura.

En el texto que Sánchez presenta hoy también se recoge la propuesta de declarar el 8 de mayo como el día de reconocimiento a las víctimas del exilio. A su vez, se compromete a culminar el proceso de exhumación de los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos y a resignificar este espacio público.

El pasado mes de junio los cinco magistrados de la Sección Cuarta de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo acordaron aceptar la medida cautelar propuesta por la familia Franco contra los planes del Gobierno de exhumar los restos del dictador del Valle de los Caídos el próximo 10 de junio, para trasladarlos al cementerio de El Pardo, donde descansa su esposa.

El Supremo paralizó así lo planes del Ejecutivo a la espera de resolver el fondo del recurso planteado por los familiares argumentando que se buscaba evitar el perjuicio que, de otro modo, se causaría a los recurrentes y, especialmente, a los intereses públicos encarnados en el Estado y en sus instituciones constitucionales, los cuales se verían “gravemente afectados” si, exhumados esos restos, se estimara el recurso y fuera preciso devolverlos al lugar en que se hallan.

Por su parte, los socialistas proponen retirar la simbología franquista de los lugares públicos y la prohibición de la exaltación y el enaltecimiento del franquismo en lugares públicos. Por último, plantean retirar las condecoraciones vinculadas a actuaciones acaecidas durante la dictadura.