Ambos partidos acordaron hoy darse una semana más de plazo para intentar consensuar una lista de candidatos, y Alonso evitó entrar en detalles pero sugirió que el obstáculo sigue siendo la defensa de Enrique López por el PP.

La Constitución exige que los candidatos sean nombrados entre magistrados y fiscales, profesores de universidad, funcionarios públicos y abogados, todos ellos juristas "de reconocida competencia con más de quince años de ejercicio profesional".

Alonso abogó por aplicar los criterios que han regido "toda la vida" la propuesta de candidatos y recurrir a nombres que cumplan ese requisito de "reconocido prestigio" al margen de opiniones individuales sobre cada cual.

El presidente del Congreso, José Bono, puso en marcha el procedimiento de renovación el pasado 30 de noviembre, momento en que se abrió un primer plazo de negociación que se agota este miércoles y que ha sido prorrogado ante la falta de acuerdo.

La portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, tampoco se refirió expresamente a López pero dijo que es quien pone pegas a los candidatos el que tendrá que explicar sus críticas.

El Congreso tiene que renovar cuatro magistrados, tres que culminaron mandato el pasado 8 de noviembre y un cuarto que falleció (Roberto García Calvo). Cuando se pactó la renovación que tenía pendiente desde hace dos años el Senado, que completó sus trámites el pasado día 2, los dos grandes partidos ya apalabraron que en la Cámara Baja se repartirían los cuatros nombres a partes iguales: dos los propondría el PSOE y otros dos el PP.