Caixabank alcanzará las 600 megaoficinas año y medio antes para combatir los tipos bajos

- Gortázar descarta cobrar a los clientes particulares por los depósitos, pero ve “adecuado” hacerlo a las empresas

- Da por cerrado el ajuste en Caixabank pero auguran nuevos procesos así en la banca para encarar el desafiante entorno

MADRID
SERVIMEDIA

Caixabank va a imprimir máxima velocidad a su plan de reestructuración de la red con la aceleración en la salida de empleados prevista por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y en la apertura de las megaoficinas ‘Store’ para combatir el difícil escenario que se dibuja con la prolongación de los tipos de interés a cero o negativos.

Así lo explicó este viernes el consejero delegado del grupo, Gonzalo Gortázar, durante la presentación de resultados, donde indicó que espera alcanzar las 600 oficinas ‘Store’ en junio de 2020 y no en diciembre de 2021 como se había planeado, al tiempo que acelerará las salidas de las 2.023 personas pactadas con los sindicatos a este mes de julio y agosto.

Ahora, reconoció, en entorno es más incierto que hace seis meses, cuando Caixabank proyectó y pactó la reorganización de la red para contar con un menor número de sucursales pero de mayor tamaño y mejor surtidas de personal para que se enfoquen en asesorar y comercializar productos, al haber anticipado el BCE más medidas para flexibilizar la política monetaria.

“Lo que vimos que era necesario se ha vuelto más evidente”, refirió en alusión al ajuste de red y plantilla, que en el momento del anuncio sorprendió ante la defensa a ultranza del banco de su tupida capilaridad.

En este sentido, indicó que el objetivo de llegar al 12% de rentabilidad que tiene Caixabank en su plan estratégico “hay que ganárselo con el sudor del día a día”, frente al 9,4% actual, porque el escenario de tipos establece unas condiciones “que no son fáciles”. Confesó que si no se hiciese nada más, el simple escenario de tipos podría hacer que no se alcance ese 12% y se quedase en el 10%, lo que obliga a reaccionar y busca nuevos ingresos y negocios.

Una palanca indicó que está en la decisión de acelerar la salida de personal afectada por el ERE. Para financiar la desvinculación el banco ha aplicado un cargo de 978 millones que euros, que hace caer un 52,1% el beneficio neto atribuido, hasta los 622 millones de euros. Sin dicho extraordinario el resultado alcanzaría los 1.307 millones y crecería un 0,7%, mientras que elevaría la rentabilidad sobre activos tangibles (ROTE) al 9,4%.

Gortázar indicó que tras ese coste para indemnizaciones y prejubilaciones el banco espera lograr 200 millones en ahorros anuales por el descenso de la estructura de gastos. Al anticipar las salidas confía que este mismo año ya pueda abaratar la partida en 80 millones, y subrayó que al hacerlo así además no se alterará el pulso comercial, pero sí se logrará que la partida de costes crezca un 3%, en lugar del 5% previsto incialmente.

La apuesta por las macrosucursales la justificó en que al contar con más especialistas (2,8 veces el de una oficina normal) son capaces de generar un 19% más de ingresos que un local tradicional, son “más productivas” y logran un margen ordinario por empleado superior, “consiguiendo más ritmo comercial” y un mejor servicio al contar con horario ampliado.

Por otro lado, subrayó que el servicio ‘In Touch’ permite a los clientes, fundamentalmente, digitales, acceder a un gestor remoto. Lanzado en el verano de 2018 refirió que este servicio cuenta con 1,1 millones de usuarios y espera alcanzar los 2,6 millones que había previsto a finales de 2021 también en junio de 2020. Según detalló, estos gestores administran tres veces el negocio de un gestor en una sucursal tradicional.

AUGURA AJUSTES EN BANCA

El ajuste de red no afectará a las sucursales rurales, donde mantendrá más de 1.000 oficinas, si bien Gortázar refirió que se ha alcanzado un acuerdo con los sindicatos en el marco de las negociaciones del ERE para que se reduzca el coste de esas oficinas disminuyendo el número de empleados por local por debajo de las cuatro personas.

El banquero descartó que Caixabank vaya a tener otra oleada posterior de ajustes dado el desafiante entorno para el negocio bancario al persistir los tipos bajos y ante la posibilidad de que el BCE penalice incluso más a la banca por custodiarle su dinero, ya que se espera que baje el cargo que aplica desde el 0,4% actual al 0,5 ó 0,6%.

“Ha terminado –el ajuste- y no prevemos uno parecido en el periodo 2019-2020 de plan estratégico”, indicó, aunque sí ve “inevitable” que siga habiendo ajustes en el sector financiero, y auguró que entidades fuera y dentro de España anunciarán procesos similares.

También cree que será un aliciente a compras y fusiones buscando reducir la partida de costes a la vez que se explora cómo elevar los ingresos, algo de lo que se desmarcó en estos momentos.

Gortázar aseguró que Caixabank no cobrará a clientes minoristas o particulares por sus depósitos. “Hemos decidido que a nuestros clientes minoristas no es adecuado”, aseguró, aunque reconoció que sí se está cobrando a clientes empresas y sugirió que es una tendencia que podría ir en el sector a más.

(SERVIMEDIA)
26 Jul 2019
ECR/caa