Discapacidad

Plena Inclusión pide que todos los campamentos de verano de la Comunidad de Madrid cuenten con personal especializado en discapacidad

- Para evitar situaciones de discriminación

MADRID
SERVIMEDIA

Plena Inclusión Madrid reclamó este lunes actualizar la normativa que regula la organización de campamentos de verano en la región, con el fin de establecer la obligación de contar con apoyos de profesionales especializados para garantizar los derechos de los niños con discapacidad.

El actual reglamento data de 1993 y, según Plena Inclusión Madrid, es preciso actualizarlo y adecuarlo a la Convención de las Naciones Unidas de Derechos de las Personas con Discapacidad y en concreto a su artículo 30 sobre participación en la vida cultural, las actividades recreativas, el esparcimiento y el deporte. Así se lo transmitió Plena Inclusión a todos los grupos parlamentarios de la Asamblea y al propio gobierno regional.

A su juicio, es "imprescindible" que el nuevo reglamento incorpore la obligatoriedad de que las entidades proveedoras de campamentos inclusivos ofrezcan los apoyos necesarios para las personas con discapacidad, con el fin de garantizar su participación en condiciones de igualdad en estas actividades. Esos apoyos deben incluir personal con titulación y preparación adecuada, prosiguió, no tanto en función del número de niños y niñas, sino de sus necesidades concretas.

"La falta de dichos apoyos es contraria a la Convención de Derechos de las personas con discapacidad de las Naciones Unidas, a sus principios y al modelo de derechos humanos de la discapacidad", recalcó.

Por otro lado, Plena Inclusión Madrid reivindicó la necesidad de incorporar en el nuevo reglamento la titulación y niveles formativos requeridos para prestar esos apoyos. también pidió incluir un módulo de intervención en el ocio con personas con discapacidad en el contenido obligatorio del curso de Monitor de Ocio y Tiempo Libre de la Comunidad de Madrid, así como homologar un curso con titulación de monitor especialista en tiempo libre con personas con discapacidad, a fin de que los equipos de profesionales que coordinan las actividades de ocio y tiempo libre cuenten con los conocimientos y recursos necesarios para dar respuesta a las diferentes situaciones durante el desarrollo de su ejercicio profesional.

A su juicio, "una formación adecuada, unida a la vigilancia por parte del organismo competente para que se cumplan dichos apoyos, contribuiría a evitar casos de discriminación como los que hemos conocido este verano".

Indicó que "avanzar en este sentido tendrá un impacto positivo sobre las personas con discapacidad y sus familias y para el resto de niños y niñas que participen en los campamentos, gracias a la oportunidad que supone para todos establecer relaciones con otras personas y a la contribución que estos espacios de diversión y ocio realizan a la hora de normalizar la discapacidad".

"La experiencia demuestra que, cuando se garantizan los apoyos que necesita cada persona, los campamentos funcionan correctamente y alcanzan los citados objetivos", concluyó.

(SERVIMEDIA)
22 Jul 2019
AGQ/gja