Aunque este programa funciona todo el año, en julio y agosto despliega sus mayores recursos por ser la época veraniega la que registra el mayor número de brotesepidemiológicos por enfermedades transmitidas por alimentos.

En los meses de verano, los servicios oficiales de Salud Pública realizan cada día 103 inspecciones en industrias alimentarias y 1.205 inspecciones en establecimientos, lo que suma un total de 1.300 actuaciones de inspección diaria en la comunidad autónoma, según informó hoy en un comunicado la Junta de Castilla y León.

En toda la campaña, los 24.471 establecimientos de restauración censados en la región son objeto de un total de 122.35 inspecciones.