"España sigue perdiendo españoles, aunque la inmigración nos ha permitido rozar los 50 millones de habitantes. Es una situación que desaparecerá en el momento en que se complique la economía y estas personas busquen otros lugares", analizó García-Juliá, en referencia a las cifras publicadas esta semana.

El foro recuerda que durante 2018, el número de extranjeros que llegaron a España creció en 285.554 personas, pero, por contra, se redujo en 98.595 el número de españoles nacidos en España. "La conclusión de estos datos es que el problema estructural demografico en España está muy lejos de solucionarse", aseveró García-Juliá.

Por ello, el Foro de la Familia reclamó "medidas urgentes para luchar el invierno demográfico, que inviten a los jóvenes a pensar en formar una familia como una realidad y no como una quimera o algo que dejar para más adelante. No se trata sólo de una cuestión económica, que también, sino de compromiso. No es casual que en la última década haya aumentado un 63,1% el número de madres con 40 años o más".

En este contexto, la organización pide "iniciativas valientes a corto plazo para revertir las cifras de nacimientos", pero "no sólo desde la política, sino desde toda la sociedad, cada uno en su propia realidad".