Así lo dijo durante su intervención en el seminario ‘Las finanzas sostenibles y su importancia en el futuro de la economía’ organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (Apie) en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander.

Escrivá aseguró que “España es de los países con mayor nivel de desigualdad” de su entorno, tras aumentar “sustancialmente” en los últimos 15 años, y señaló que la política fiscal tiene “poca capacidad redistributiva”, lo que da lugar a “problemas de movilidad social”.

Por ello, el presidente de la Airef abogó por avanzar en la evaluación del diseño de las políticas públicas y apuntó que la “baja calidad” de las instituciones españolas acaba generando “desigualdades e injusticias”.

En cuanto al tema de las jornadas, las finanzas sostenibles, Escrivá indicó que éstas deben centrarse en tres dimensiones: la medioambiental, la social -haciendo frente a la desigualdad y promoviendo el crecimiento inclusivo-, y la gobernanza. En el ámbito medioambiental, el presidente de la autoridad fiscal subrayó la necesidad de que todos los niveles de gobierno estén más involucrados y recomendó que las políticas y planes de energía y clima se incorporen en los planes económicos y presupuestarios de los gobiernos.

En esta misma línea, recordó que la fiscalidad verde en España no sólo está por debajo de la media tanto de la UE como de la zona euro, sino que su nivel de recaudación es actualmente inferior al que el país tenía en 1995. Por último, sobre este tema también advirtió de que la ampliación en los últimos años de los ámbitos en los que los ayuntamientos pueden realizar inversiones financieramente sostenibles da lugar a que los recursos no se estén focalizando en actuaciones tan urgentes como las medioambientales.

GOBERNANZA

En cuanto a la dimensión de gobernanza, Escrivá señaló que en países como España, Francia o Italia, en los que la deuda ha crecido sustancialmente en los últimos 10 años, “el problema no ha sido el marco fiscal europeo”, ya que éste es igual para todos los países y en algunos como Alemania y Holanda no han visto crecer su deuda.

Sobre este hecho, Escrivá apuntó que esos países tienen instituciones fiscales “mucho mejores” en los que existe una mirada a largo plazo y presupuestos de carácter plurianual.

Así, destacó que mejorar el sistema de gobernanza, tomando como ejemplo el modelo holandés, puede ayudar desde el punto de vista técnico a que gobiernos de coalición encuentren consensos en las políticas a desarrollar, así como en la mayor eficiencia de estas.