El abogado que representa al PP fue el último en preguntar a Bárcenas y durante su interrogatorio trató de poner de relieve las contradicciones en las que podría haber incurrido en sus revelaciones de hoy y las declaraciones que ha ido haciendo en distintos procesos judiciales.

Bárcenas insistió en que estaba diciendo toda la verdad y en que no incurrió en manipulación alguna de los documentos que copió del portátil Toshiba Libreto a un pen drive y que más tarde entregó al juez Pablo Ruz, instructor de la época I de la trama 'Gürtel'.

Insistió en que la información sensible contenida en el Toshiba pudo copiarla, pero destacó que no pudo extraer los datos y documentos del portátil Apple porque fue destruido antes y a él se le prohibió la entrada en la sede del PP de la calle Génova. “Mienten sus clientes y yo lo comprendo”, le dijo al abogado.