Así se pronunció en el marco de una campaña que ha lanzado junto a otras nueve entidades europeas para advertir a los usuarios de los riesgos ligados a la compra de entradas en webs de reventa no autorizadas, según informó a través de un comunicado en el que también anunció que se ha puesto en contacto con la Dirección General de Consumo para que investigue las “prácticas” de las páginas web de reventa de entradas y “se asegure” de que cumplen con la ley.

La portavoz de OCU, Ileana Izverniceanu, denunció que al acceder a este tipo de páginas, los consumidores se enfrentan a problemas como tener que pagar varias veces el precio oficial de la entrada o que esta no se corresponde con la descripción del vendedor o que está a nombre de otra persona.

“Comprar una entrada de reventa a un vendedor no autorizado a través de internet es, a menudo, muy arriesgado y costoso”, puntualizó, al tiempo que insistió en la recomendación de adquirir las entradas “en la taquilla oficial o a través de un revendedor autorizado que no esté cobrando la entrada a un precio superior al oficial”.

OCU advirtió de que los problemas derivados de la compra de entradas a través de webs de reventa “se están extendiendo rápidamente por toda la UE”. “En muchas ocasiones, son las compañías que operan entre países las que tienen estas prácticas abusivas”, denunció para, a continuación, instar a las autoridades de los países en los que estas páginas de reventa no cumplen con la normativa a “intervenir para asegurarse de que lo hacen”.