Con motivo del Día Mundial Sin Tabaco, que se celebra cada 31 de mayo, el Grupo de Trabajo sobre Tabaquismo de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) pide la plena aplicación del Convenio Marco para el Control del Tabaquismo de la Organización Mundial de la Salud,que incorpora medidas como la monitorizar el consumo de tabaco; la protección de la población del humo del tabaco; ofrecer ayuda para dejar de fumar; advertir acerca de los peligros del tabaco, hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio y aumentar los impuestos del tabaco.

También hace referencia a otras iniciativas no gubernamentales, generadas por la sociedad civil, para fomentar el avance hacia una sociedad sin tabaco. “Entre ellas, prohibir el consumo de tabaco en lugares públicos y privados (parques, estadios deportivos, playas, etc.) para reducir la visibilidad del tabaquismo en la sociedad y fomentar un modelo de sociedad más saludable. Para la SEE, estas propuestas son clave para una generación futura libre de tabaco”, declaran en un comunicado.

El Grupo de Trabajo sobre Tabaquismo de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) estima que, en España, el consumo de tabaco causó, en la población mayor de 34 años, 56.122 muertes en 2016, de las cuales un 55% fueron por cáncer de pulmón y enfermedades respiratorias. Por estos datos hacen un llamamiento para que se tomen medidas que logren “la erradicación del consumo de tabaco en España, que reduciría hasta en un 80% la mortalidad por cáncer de pulmón y EPOC”.

“El consumo de tabaco es la principal causa de cáncer de pulmón y de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), además de un importante factor de riesgo de bronquitis, neumonía, gripe, tuberculosis y de exacerbación de crisis asmáticas”, señala la organización.

Recuerda, asimismo, que la medida más eficaz para mejorar la salud pulmonar es reducir el consumo de los productos que contienen tabaco y proteger de su exposición a terceras personas, principalmente si se trata de niños o personas vulnerables (aquellas que están enfermas, son muy mayores, etc.).

El Grupo de Trabajo de Tabaquismo apunta que el consumo de los productos que contienen tabaco y la exposición al humo ambiental que producen, además de aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades respiratorias, “incrementan el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y cáncer, entre otros problemas de salud”.