“Teniendo en cuenta el deterioro de la situación política, económica, de derechos humanos y humanitaria en Venezuela, Acnur considera ahora que la mayoría de las personas que están huyendo del país se encuentra en necesidad de protección internacional como personas refugiadas”, explicó Naciones Unidas.

La nota de orientación sobre Venezuela, que ha sido actualizada respecto a la de 2018, tiene el propósito de “apoyar a las personas encargadas de resolver las solicitudes de protección internacional presentadas por los solicitantes de asilo de Venezuela, y a los responsables de definir las políticas gubernamentales sobre este tema”.

A finales del 2018, alrededor de 460.000 personas venezolanas solicitaron formalmente asilo en el extranjero, en su mayoría en los países vecinos en América Latina. La nota de orientación reconoce segura que puede ser “inviable realizar una determinación de la condición de refugiado de manera individualizada”, por lo que recomienda un “reconocimiento grupal”.

La agencia de la ONU indica que, para ciertos perfiles de venezolanos y venezolanas en situación de riesgo, se aplica la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951. En todo caso, la mayoría de las personas de Venezuela se encuentran en necesidad de protección internacional como refugiadas con base en los criterios más amplios contemplados en la Declaración de Cartagena sobre Refugiados de 1984, que se aplica en América Latina.

“Esto es así por las amenazas contra su vida, su seguridad o libertad debido a las circunstancias que están perturbando gravemente el orden público en Venezuela”, explicó Acnur, que también pide a los Estados garantizar que las personas venezolanas, sin importar su estatus legal, no sean deportadas o retornadas forzosamente a Venezuela.