Según informó el Estado Mayor de la Defensa (Emad), la ceremonia de relevo se celebró en la base aeronaval de Sigonella (Italia) y estuvo presidida por el jefe de Planes y Operaciones del Mando Aéreo de Combate, coronel Rafael Saiz Quevedo. En el acto estuvieron presentes el comandante de la base, ‘colonello’ Gianluca Chiriatti, el segundo jefe del Naval Air Station, ‘commander’ Moran, y una representación del destacamento polaco, también participante en la operación.

Durante su alocución, el coronel Saiz Quevedo destacó que “el trabajo constante y sereno y la mejora continua son los que os llevarán al éxito, a sentiros orgullosos de lo que hacéis y a contemplar con satisfacción cada despegue del Delta-4”.

En el acto se llevó a cabo la imposición de condecoraciones a los miembros del contingente saliente, en reconocimiento a su contribución para alcanzar los objetivos de la misión.

El nuevo contingente está compuesto por 39 personas pertenecientes a distintas unidades del Ejército del Aire. Se prevé que las tripulaciones y personal médico de apoyo a la misión sean relevados por una nueva rotación en un plazo estimado de dos meses.

En lo referido a los medios materiales, el destacamento cuenta con el avión ‘D.4 Vigma’ español, que recientemente ha completado las 3.000 horas de vuelo, y los equipos auxiliares y de apoyo necesarios para llevar a cabo la misión encomendada bajo mandato de la UE.

La operación ‘Eunavformed Sophia’ ha quedado diezmada después de que la UE haya decidido dejar sin barcos esta operación, en la línea de los reclamado por Italia para aceptar su prórroga durante seis meses más.

De este modo, los Estados miembros se avinieron a la propuesta lanzada por el Servicio de Acción Exterior para mantener la operación y darles más tiempo para encontrar un punto de encuentro en lo referido al desembarco y posterior distribución de las personas rescatadas por la misión.

España aportaba el buque de acción marítima ‘Rayo’ e Italia la fragata ‘Luigi Rizzo’. Al mismo tiempo, las Fuerzas Armadas españolas proporcionan un helicóptero y un avión patrulla, el país transalpino otro helicóptero y Países Bajos y Polonia un avión cada una.

En su momento, la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, dijo estar “muy disgustada” por lo que considera un “fallo” de la UE y recordó que ha defendido “al máximo” en Bruselas la continuación de la operación, porque “no podemos dejar el Mediterráneo sin protección”.

Llegó a responsabilizar a la política migratoria del vicepresidente del Gobierno italiano, Matteo Salvini, de “haber hecho fracasar” esta misión.