Medio ambiente

El aguilucho cenizo protagoniza en España el Día Mundial de las Aves Migratorias

- SEO/BirdLife marcará esta primavera 13 ejemplares con GPS para conocer sus rutas migratorias

MADRID
SERVIMEDIA

SEO/BirdLife ha elegido al aguilucho cenizo como especie protagonista en España para el Día Mundial de las Aves Migratorias, que se celebra este sábado. Es una rapaz migradora transahariana cuyas poblaciones pasan el invierno en el Sahel africano y está clasificada como vulnerable en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.

Se sabe que las poblaciones españolas de aguilucho cenizo invernan en el Sahel africano, pero hasta 2018 no se habían marcado con sistemas GPS de alta resolución. Estos dispositivos permiten conocer con todo detalle los movimientos y la migración de esta rapaz amenazada, sus zonas de campeo en España, las zonas de invernada en África y los lugares donde para a descansar durante sus viajes migratorios, según informó hoy SEO/BirdLife.

Esta organización indicó que la conservación de las aves migratorias es más complicada, pues no conocen fronteras y a lo largo del año pasan por muy diversos países y continentes, por lo que asegurar su conservación en el futuro pasa por conocer dónde crían, dónde pasan el invierno, qué rutas emplean en su migracióny en qué lugares paran a descansar durante sus viajes.

Ése es el objetivo del programa Migra que SEO/BirdLife puso en marcha en 2011 con la colaboración de la Fundación Iberdrola España. "Sólo el conocimiento de sus rutas migratorias y una gestión adecuada, coordinada y conjunta entre países permitirá que las aves migratorias viajen sin encontrar amenazas", apuntó Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEO/BirdLife.

Ruiz apeló al reciente informe internacional Ipbes, que es el mayor análisis sobre el estado de la biodiversidad en la Tierra y concluye que más de un millón de especies están amenazadas de extinción. "Nos da desgraciadamente la razón. Las tendencias poblacionales de la avifauna son negativas y son un indicador del estado de salud de los ecosistemas. Necesitamos seguir haciendo ciencia y estudiar a las aves a la vez que naturalizamos a la sociedad", añadió.

Este año, SEO/BirdLife, en colaboración con Fundación Iberdrola España, ha marcado tres aguiluchos cenizo en Albacete y dos en Segovia, y tiene previsto marcar otros ocho por todas España para conocer y conservar mejor esta especie. "Proyectos como éste contribuyen fuertemente a lograr las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en concreto el número 15: Vida de Ecosistemas Terrestres", destacó Fernando García, presidente de la Fundación Iberdrola.

ESPECIE EN DECLIVE

El aguilucho cenizo es una especie en declive. El último censo nacional indica que en España había entre 4.200 y 5.300 parejas en 2017, mientras que en 2006 había unas 6.000 parejas, lo que representa un descenso poblacional en torno al 30% tan sólo una década. La mayor parte de los individuos se localizan en zonas de cultivo de cereal, aunque también habitan en marismas mareales y en zonas de matorral.

En 2018 se marcaron 10 ejemplares adultos en Andalucía, Castilla y León, Cataluña y Galicia dentro del programa Migra. Esta primavera se marcarán 13 aguiluchos más en Albacete, Cáceres, Huelva, Madrid, Palencia, Salamanca y Segovia.

Para el marcaje se emplean unos dispositivos de seguimiento remoto, que toman su posición con un GPS cada cinco minutos y la envían a través del sistema GSM como si de un teléfono móvil se tratase. De esta manera, cada día se obtienen decenas de localizaciones de cada ejemplar que nos permitirán estudiar con mucho detalle el uso del espacio y el hábitat a lo largo de todo el año, y con ello asegurar su conservación en el futuro.

Las principales amenazas que se ciernen sobre el aguilucho cenizo se relacionan con su dependencia de los cultivos de cereal y con la intensificación de las prácticas agrícolas. La recogida mecanizada del cereal y la introducción de variedades precoces impiden que los pollos completen su desarrollo antes de la cosecha, lo que supone la pérdida de numerosas nidadas bajo las cosechadoras.

Los cambios en los usos tradicionales son fuente de importantes amenazas, ya que reducen las áreas de reproducción, introducen modificaciones en los cultivos y afectan a la densidad de presas por la disminución de la heterogeneidad ambiental y del uso de pesticidas. Finalmente, cabe señalar que los nidos de esta especie suelen sufrir una intensa predación por parte de zorros, jabalíes y otras rapaces.

(SERVIMEDIA)
10 Mayo 2019
MGR/caa