Se espera que ocasione inundaciones que pueden llegar a acumular hasta 300 mm en los próximos días, lo que podría provocar serios daños a la población, así como la destrucción de viviendas, escuelas, hospitales, carreteras o campos de cultivo.

Según las últimas informaciones enviadas por la oficina de la ONG en la provincia de Cabo Delgado, alrededor de 30.000 personas han sido trasladadas a zonas seguras. Por el momento, no se han registrado daños relevantes en sus zonas de actuación, a excepción de Pemba, la capital de Cabo Delgado, donde a primera hora de la mañana se reportaban un fallecido y un herido.

Las próximas horas “serán claves” para medir la magnitud del daño. La mayor preocupación se centra en el impacto que las inundaciones puedan tener sobre la población.

“Aunque el norte esté menos poblado que el centro del país, Kenneth no deja de suponer un segundo azote para Mozambique en muy poco tiempo. La realidad de estas comunidades son en su mayoría de familias campesinas muy vulnerables a este tipo de desastres debido a factores como su alto grado de pobreza, los materiales de sus casas o la cercanía de las mismas a zonas geográficamente débiles como las laderas o los alrededores de los ríos”, según el responsable de Ayuda Humanitaria de Ayuda en Acción, Alejandro Zurita.

La organización ya ha habilitado una página web destinada a recaudar fondos para reconstruir el país que ya se enfrentaba a los daños causados el pasado marzo por el ciclón Idai, que afectó a más de 2 millones de personas entre Mozambique, Malawi y Zimbabue, provocó más de 70.000 desplazamientos y originó la muerte de más de 1.000 personas.

Asimismo, con el objetivo de hacer frente a enfermedades como el cólera, se están construyendo más de 200 letrinas y formando a la población en prácticas, actitudes y hábitos de higiene. Este proyecto de acción humanitaria está siendo desarrollado de manera conjunta con organizaciones locales y otras internacionales.