“Esta triada de derechas no ha de ganar las elecciones”, trasladó Timmermans en el Palau de la Festa a las 2.000 personas -entre los que estaban dentro y los que se quedaron fuera- que se congregaron en el acto del PSPV-PSOE, en el que señaló que “la triple derecha española y todas las europeas quieren romperlo todo, devolvernos al pasado más rancio y retrógrado”.

Timmermans señaló que “la triple derecha española y todas las europeas quieren romperlo todo” pero “les vamos a parar con nuestros votos”. Por ello, repitió que, tras las elecciones del 26 de mayo, “en ninguna circunstancia pactaré con la extrema derecha para obtener” una investidura. “Nunca, nunca”, remachó.

Puso en valor la política tras señalar que la Comunidad Valenciana sufrió “lo más obsceno de la política” y destacó que la política hay que ejercerla con “cuidado y decencia para que sea una verdadera herramienta de cambio”.

Por su parte, Susana Ros, miembro de la Ejecutiva del PSOE y ‘cabeza de lista’ socialista por Castellón para el Congreso, puso en valor que los gobiernos socialistas tienen como “único fin” que los ciudadanos “vivan mejor”. También agradeció a Ximo Puig "devolver la dignidad y la honradez” a la Comunidad Valenciana.

Ensalzó la apuesta por la “igualdad” del PSOE frente a las “dos derechas y la ultraderecha” que usa eufemismos para mencionar el “aborto” y lo consideran un “fin de semana en Londres”; y que cuando una mujer “dice no, es no”.

Ros hizo un llamamiento a la movilización para que “no nos confiemos de las encuestas”. Sánchez, dijo la dirigente socialista al presidente, es un “gran corredor de fondo, infatigable y resistente. Se corre con las piernas, se respira con los pulmones y se gana con el corazón, y el corazón está en la izquierda, y el corazón es nuestro lema de campaña”.

Por su parte, la alcaldesa de Castellón fue la encargada de abrir el acto con una breve intervención en la que presumió de la bajada de impuestos acometida en el Consistorio al que aspira seguir gobernando a partir del próximo 26 de mayo.