En un acto de precampaña en Menorca, Casado se refirió así al sondeo que recoge que el PSOE ganaría las elecciones generales con una ventaja del doble de escaños sobre el PP y podría gobernar la próxima legislatura apoyado por los mismos partidos con los que ganó la moción de censura.

“Hoy ha pasado lo de siempre, tenemos CIS y, claro, a uno le da la risa”, transmitió el presidente de los populares, para quien este último barómetro ya es “sobrenatural” y parece “un laboratorio culinario”. “¡Sánchez va a sacar 415 escaños y el Pacma va a superar al PP!”, ironizó.

Según ese sondeo, el PSOE sería primera fuerza con el 30,2% de los votos y entre 123 y 138 escaños, mientras que el PP se quedaría con el 17,2% de los votos y entre 66 y 76 escaños. Unidas Podemos obtendría el 12,3% de los votos y entre 28 y 34 parlamentarios, que se sumarían a En Comú Podem (0,6% de voto y de 5 a 7 escaños) y a Compromís (0,9% de voto y 1 o 2 escaños).

En palabras de Casado, el último barómetro del CIS “es la multiplicación de los panes y los peces” para situar al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, como “el mejor presidente del mundo mundial”. En este escenario, dijo que en lo que coinciden todas las encuestas es que la única forma para echar a Sánchez es votando al PP.

Enfatizó, por tanto, que “quien quiera echar a Sánchez solo puede votar al PP”, erigiéndose así en “única alternativa” al PSOE frente a Ciudadanos y Vox, sus competidores directos. En otras palabras, se dirigió a quienes quieren que “España permanezca unida” para pedirles que “unan su voto en el PP”.

Lo contrario, avisó Casado, será un Gobierno socialista con Arnaldo Otegi, Quim Torra, Carles Puigdemont y Pablo Iglesias, lo cual “no es serio”. En este punto, denunció que en la cúpula del PSOE sean “tremendamente fuertes contra los que defienden la Constitución y tremendamente débiles con aquellos que la quieren romper”.

“A mí me duele España”, aseveró Casado, para a renglón seguido dejar claro que no se sentará a hablar con EH Bildu si logra hacerse con el Gobierno tras las elecciones generales del 28 de abril. Es más, advirtió de que si en Álava se dispersa el voto entre Vox y Cs, estos partidos podrían no conseguir escaño y en cambio favorecer que lo logre EH Bildu para que “Otegi sea más decisivo en el futuro Gobierno” socialista.

En base a ello, Casado llamó a “parar” democráticamente ese hipotético Gobierno del PSOE con quienes ayudaron a que prosperase la moción de censura que supuso el fin del mandato de Mariano Rajoy. “Que no nos engañen, Sánchez es un peligro público para España”, añadió.

“Es el presidente más radical y sectario que ha tenido este país”, continuó Casado, refiriéndose a que el líder socialista “ha pactado con los enemigos de nuestro país, un Estado maravilloso, una nación históricamente magnífica y que ellos quieren vender a plazos y trozos”.

También cargó contra Sánchez por rehuir el debate cara a cara con el líder del principal partido de la oposición y que actualmente le saca más de 50 escaños al PSOE y tiene mayoría absoluta en el Senado. “Es un desprecio no a mí, que yo estoy curado de espanto, sino a millones de españoles y a todo un país que quiere saber cuál es el modelo de Sánchez”, dijo Casado.

A su juicio, de la actitud del PSOE se desprende que “son muy infantiles” y piensan que si se esconden la gente no les ve. En todo caso, y pese a las encuestas, Casado opinó que ganará al PSOE en las urnas y logrará gobernar para “evitar que este país caiga en manos de quienes quieren destruirlo”.