Esta ley establece que las víctimas de supuestos abusos policiales cometidos en el País Vasco entre 1978 y 1999 podrán ser reconocidas a efectos legales por esta nueva norma, que modifica parcialmente otra de 2016 que no pudo aplicarse tras ser recurrida al Tribunal Constitucional.

Esta ley vasca de abusos policiales fue aprobada este jueves por el Parlamento vasco con el voto en contra de PP y la abstención de EH Bildu. Precisamente los diputados del PP abandonaron la Cámara autonómica cuando el parlamentario abertzale Julen Arzuaga tildó de “nazis” a los miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

En este sentido, la Fundación Víctimas del Terrorismo difundió este viernes un comunicado conjunto de la mayoría de las asociaciones que representan a este colectivo, entre las que destacan la AVT, Covite, la Asociación Dignidad y Justicia y la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas.

“RELATO FALAZ”

Los firmantes de esta nota expresaron su “total rechazo” a la ley vasca de abusos policiales, después de que el Gobierno de Pedro Sánchez retirase el pasado mes de agosto el recurso que contra esta norma presentó el Ejecutivo de Mariano Rajoy, que entendía que esta regulación invadía competencias estatales.

Así, las asociaciones de víctimas consideran que la nueva norma “sigue invadiendo competencias exclusivas del Estado y ampara la vulneración de derechos fundamentales de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad mediante la creación de una comisión ‘ad hoc’”.

Estos colectivos entienden que la ley aprobada este jueves por el Parlamento vasco “no sólo atenta contra el honor” de policías y guardias civiles, “sino que lo hace también contra todo el colectivo de víctimas del terrorismo, al favorecer un relato falaz de toda la actividad terrorista desarrollada durante décadas por ETA”.