El índice queda regulado en una orden publicada esta semana por el Boletín Oficial del Estado (BOE) y se asemeja al Índice de Calidad del Aire Europeo, puesto en marcha en noviembre de 2017 por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) y la Comisión Europea, y que permite a los ciudadanos comprobar la calidad del aire en ciudades y regiones del continente.

La orden, recogida por Servimedia, indica que el Índice Nacional de Calidad del Aire se basa en cinco contaminantes: partículas en suspensión PM10, partículas en suspensión PM2,5, ozono troposférico (O3), dióxido de nitrógeno (NO2) y dióxido de azufre (SO2).

El índice servirá de referencia a todas las comunidades autónomas y ayuntamientos con competencias en la gestión de la calidad del aire, y recogerá datos de estaciones de medición que se publicarán de forma continua en la web del Ministerio para la Transición Ecológica.

Para los contaminantes NO2, O3 y SO2 habrá valores de concentraciones horarias, en tanto que los de PM10 y PM2,5 se harán con la media de las 24 horas anteriores.

En función de los valores registrados para cada contaminante, habrá un nivel de calidad del aire que podrá ser muy bueno (color azul), bueno (verde), regular (amarillo), malo (rosa) o muy malo (rojo).

Cada contaminante cuenta con un rango. Así, en PM2,5 el nivel puede ser muy bueno (de 0 a 10 microgramos por metro cúbico), bueno (de 11 a 22), regular (de 21 a 25), malo (de 26 a 50) y muy malo (de 51 a 800).

En PM10 también hay nivel muy bueno (de 0 a 20 microgramos por metro cúbico), bueno (21-35), regular (36-50), malo (51-100) y muy malo (101-1.200).

Los niveles de SO2 varían entre muy bueno (0 a 40 microgramos por metro cúbico), bueno (41-100), regular (101-200), malo (201-400) y muy malo (401-1.000).

En O3 los rangos son los siguientes: muy bueno (0-80), bueno (81-120), regular (121-180), malo (181-240) y muy malo (241-600).

Y en SO2, se establecen valores de nivel muy bueno (0 a 100 microgramos por metro cúbico), bueno (101-200), regular (201-350), malo (351-500) y muy malo (501-1.250).

El Índice Nacional de Calidad del Aire reflejará el peor nivel de cualquiera de los cinco contaminantes.

Esta iniciativa la quiso poner en marcha el anterior Gobierno de Mariano Rajoy porque en enero de 2017 aprobó un real decreto en este sentido con el fin de que los ciudadanos conozcan cómo es el aire que respiran y para ayudar en la toma de decisiones cuando hay episodios de contaminación atmosférica.