Marcos de Quinto ocupará el hueco en esa candidatura entre Rivera, candidato a la Presidencia del Gobierno y cabeza de lista al Congreso por Madrid, y Sara Giménez, responsable de Igualdad de la Fundación Secretariado Gitano, que ya fue presentada como número tres de esa lista.

La confirmación se produjo en un acto celebrado en Toledo en el que participó el propio Marcos de Quinto junto a Rivera, al que será cabeza de lista al Congreso por esa provincia, Juan Carlos Girauta, y a la candidata a la Presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha en las elecciones autonómicas del 26 de mayo, Carmen Picazo.

Marcos de Quinto confesó que tiene "un poco de vértigo" y que entra en política "no para solucionarme la vida sino para complicármela", y lo hace de la mano de Ciudadanos "porque creo en Ciudadanos", porque es el partido que "de verdad lucha por la libertad". En su "modesta opinión", explicó, la derecha española siempre ha hablado de libertad pero vinculada al ámbito económico y de una forma "sospechosa de amiguismo", y en el ámbito de las libertades individuales ha sido "un poco rezongona".

Por su parte, la izquierda, que siempre ha hecho bandera de esas libertades, ha tenido una actitud "intervencionista". Además, los partidos de izquierda han recelado de la figura del empresario, y él está convencido de que "no hay ningún país que vaya bien si a sus empresas no les va bien".

Cree, además, que la sociedad española está "un poquito harta de que nos traten de separar" y que Ciudadanos puede hacer frente a esa realidad, y que también puede colocar a España "donde se juegan las cosas" en un mundo globalizado, con más influencia en el exterior.

Marcos de Quinto considera que todo partido es "reflejo de la sociedad a la que aspira", y Ciudadanos aspira a un país "no sectario, abierto y sin complejos". Argumentó, en ese punto, que la capacidad de la formación para llegar a acuerdos con el PP y con el PSOE no es muestra de incoherencia sino, muy al contrario, de que es coherente y además no es sectario.

Además, ha demostrado que está "donde tiene que estar y no donde le dicen que tiene que estar", y por ello ha salido a la calle a defender el orgullo LGTBI, a las mujeres o la unidad de España, "porque tenía que estar, y alguno no estuvo". "A los que sacan una foto", dijo, en referencia a las críticas a Ciudadanos por su presencia en la plaza de Colón junto al PP y Vox, "que saquen el álbum entero".

'CARA A CARA' CON SÁNCHEZ

Rivera aseguró que los españoles tendrán que "elegir" a quienes quieren cómo ministros, si a personas como Marcos de Quinto en áreas relacionadas con las empresas y la industria, o a otros como el dirigente de Podemos Pablo Echenique. "Sé que por Twitter os queréis mucho", dijo al empresario en referencia a las disputas dialécticas entre ambos en esa red social.

Apostó por un gobierno "de los mejores", formado por criterios de "meritocracia" y no con "dedazos", que ponga fin a cuarenta años de bipartidismo y que se base en una premisa básica: "no hay que ser Einstein", aseguró, para saber que quienes quieren "liquidar" el Estado no pueden ser los aliados del presidente de ese Estado. Diálogo sí, precisó, pero con quienes respetan las reglas de juego, porque "sin reglas de juego un país es una selva, con ellas es una democracia".

Rivera subrayó que solo Ciudadanos ha tenido la "valentía" de apoyar una investidura que no era suya para desbloquear la legislatura, y pidió no hablar más "del aborto ni de los huesos de Franco", porque los españoles no quieren más "cruzadas" mirando al pasado sino afrontar los retos del futuro.

Pidió por ello a los líderes del PP y del PSOE, Pablo Casado y Pedro Sánchez, respectivamente, "que aterricen en el 2019", y se dirigió especialmente al presidente del Gobierno para reiterar su disposición a un debate 'cara a cara' en el que se contrapongan los dos proyectos que, en su opinión, confrontan en las elecciones generales: "una nación de naciones", es decir de "provilegios" para unos y "agravios" para otros, de "ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda", frente a un proyecto de "ciudadanos libres e iguales".

"LE QUITAN EL AVIÓN Y LAS LLAVES"

"O escogemos la nación de naciones y quienes quieren romper España llevan la batuta", alertó, o se conforma un Ejecutivo "sin separatistas que lo condicionen". Se comprometió, en ese punto, a no gobernar "nunca" con el apoyo de quienes quieren "convertirme en extranjero en mi tierra". "Nunca voy a gobernar con ellos", afirmó.

Rivera apostó por recuperar la dignidad, "fundamental para un país que se quiera a sí mismo", y eso pasa por no tolerar "que quienes quieren liquidar España pasen por caja" y por echar con votos a un presidente "débil" que no dice nada de la manifestación de este sábado de los independentitas en Madrid "porque le quitan el avión y las llaves de La Moncloa", porque son ellos "los que mandan" y saben que con Ciudadanos "nunca van a mandar".

En su intervención, expuso tres compromisos: el primero de ellos, un "gran diálogo nacional entre españoles", escuchando a expertos y profesionales para hablar de las grandes reformas pendientes. El segundo, "no dar ni agua" a los independentistas y sí "todo el agua del mundo" en forma de diálogo a quienes "quieren el bien" para España.

Precisó, en ese sentido, que en los votantes del PP y del PSOE no ve "enemigos" sino compatriotas, y se dirigió a quienes tradicionalmente han votado a esos dos partidos y se sienten "desencantados" para invitarles a votar a Ciudadanos, "esta también es su casa".

El tercer compromiso es fomentar el talento y "acabar con los dedazos, con los enchufes", asegurando "procedimientos limpios" para acceder a las empresas y organismos públicos, ya que el Estado "no es un botín", sino el instrumento para garantizar los derechos de todos los españoles. En ese punto, acusó a Sánchez de haber nombrado "más de 500 cargos a dedo para nueve meses", y a los socialistas de hacerse "fotos con quienes disparaban el tiro en la nuca, como el señor Otegi", a pesar de que el exlíder de Batasuna nunca fue condenado por delitos de sangre.

Carmen Picazo agradeció a Ciudadanos "la valentía de defender todos lo mismo en cualquier pueblo de España", y Girauta precisó que se acaba de instalar en Toledo y tiene que "aprender todo" sobre esa tierra, pero en cualquier rincón de España su objetivo es hacer frente a la "amenaza a la integridad territorial" que supone también un riesgo para la libertad y los derechos de todos los españoles.

Acusó al PP y al PSOE de "dejadez" y de "reparto de poder" durante décadas al estilo de la época de la Restauración, y de haber alimentado con ello una "asfixiante hegemonía" en algunos territorios de quienes volverán a ser "los socios de Sánchez si no lo evitamos". Con el líder socialista, enfatizó, "nosotros hemos quemado todos los puentes porque primero los quemó él" prometiendo indultos a los independentistas que puedan ser condenados por el Tribunal Supremo y negociando "cosas que son sagradas".